Desmontar el horno y repararlo es muy sencillo. En primer lugar hay que sacarlo del mueble, para ello abrimos la puerta y veremos unos tornillos que lo sujetan a la madera (suelen ser cuatro), los sacamos y tiramos del horno con cuidado. Si lleva mandos para el resto de funciones de la cocina -como fuegos de gas- tendrá unos alargadores que consisten en unas piezas de plástico que se introducen unas dentro de otras por lo que las sacamos con cuidado para no dañarlas, poniendo especial atención que todos los mandos estén a cero para luego montarlos sin problemas. También hay que llevar cuidado con el cable de alimentación: si va con enchufe se quita y ya está pero si va conectado con regletas hay que quitar la corriente y desmontarlas.
vista trasera de las partes principales
Una vez el horno fuera quitamos su tapa trasera que suele ir con varios tornillos y vemos sus accesorios principales (segun modelo)
1- resistencia superior
2- bombilla
3- motor de giro
4- termostato
5- resistencia inferior
En este articulo trataré la sustitución de la resistencia inferior del horno.
El siguiente paso será quitar la tapa de abajo del aparato o solera, lo mas común es que vaya remachada, por lo que con un taladro quitamos la cabeza de los remaches y si lo tuviese algún tornillo.
vista de la tapa inferior
Una vez liberada la tapa de sus remaches y tornillos hay que sacarla con cuidado de no estropear el material aislante (también llamado pica-pica) que hay en su interior. Este está sujeto con alambre que se suelta o corta pensando que luego hay que montarlo otra vez.
levantar tapa y material aislante
Y ya tenemos a la vista la chapa de protección de la resistencia (el tornillo que la sujeta y sus conexiones ya se veían antes). Procedemos a desconectar los cables tomando nota de donde va cada uno. El tornillo de sujeción suele estar tan oxidado que es mas fácil romper un poco la chapa que intentar desmontarlo, pero eso tiene solución después.
resistencia a la vista
La resistencia va unida a la chapa por medio de unas pestañas que se doblan y la mantienen sujeta, en caso que se nos rompan podemos hacer unos taladros en la chapa y sujetarla nueva con alambre.
resistencia nueva sujeta a su chapa de protección
Adquirimos una resistencia nueva a semejanza de la vieja en conexiones, potencia y forma. Montamos todo al contrario que desmontamos. En el caso que hubiésemos roto la chapa donde se sujetaba la resistencia, solucionamos con una arandela o trozo de pletina que haga presión al apretar el tornillo como se ve en la ultima imagen.
solución para la sujeción
Una vez montado todo volvemos a colocar el horno en su mueble y a disfrutar de un buen asado para celebrar nuestra pericia.
Un truco: para que los tornillos que sujetan el horno al mueble agarren bien introducimos en el agujero de la madera que dejó el tornillo al desmontarlo un palillo o astilla de madera, así hará cuña y apretará como si fuese madera nueva.