Seguro que muchos de vosotros os habéis encontrado con este problema en más de una ocasión, los típicos cajones atascados cada vez que vamos a abrirlo. Aunque no es nada grave, lo cierto es que se trata de una situación muy incómoda cuando estamos recogiendo o guardando cosas. Sin embargo, tiene solución y, lo cierto es que es muy sencilla.
Para ello, lo que vamos a necesitar es jabón de glicerina o cera blanca. Lo que haremos es frotar con uno de estos productos los carriles de los cajones atascados. Con esto conseguiremos que el cajón resbale mejor y se abra y cierre sin ningún problema.
Si el carril de vuestro mueble no es de plástico sino de metal, podemos sustituir el jabón por vaselina. Debéis untar un poco de ella sobre los carriles y comprobaréis como el cajón corre mucho más fluido. Como veis, un truco muy fácil y sencillo para soltar los cajones atascados.
¿Qué os parece? ¿Tenéis este problema en algún mueble de la casa? ¿Cómo lo habéis solucionado?