En el primer reportaje sobre 'Consejos para restaurar muebles' hicimos una recopilación de los pasos fundamentales que se suelen seguir para recuperar un mueble de madera, así como de las técnicas más habituales en la decoración y acabado de los trabajos. Sin duda restaurar muebles II es lo mejor para tener un estilo clásico y único para el hogar.
Todo ello con la intención de que cualquier persona interesada en iniciarse en esta atractivo y embaucador mundo de la restauración cuente con las nociones básicas y fundamentales para enfrentarse a su primer proyecto.
De este modo, en esta ocasión vamos a centrarnos en otro de los factores claves para cualquier trabajo de bricolaje, que son las herramientas y materiales. De ellos va a depender la facilidad con la que desarrollaremos cada paso, así como el resultado final que obtengamos.
A continuación, te describiremos los elementos y materiales que debes utilizar para restaurar muebles II:
Lijadora eléctrica y lijas. Como ya sabéis, antes de comenzar a restaurar, tunear y renovar un mueble u objeto, lo normal es que tengamos que realizar un lijado inicial, para eliminar cualquier resto de pintura, barniz.. Además, al lijar podemos eliminar imperfecciones y conseguir una superficie lisa, preparada para ser trabajada.
De este modo, lo normal es que, con el tiempo, nos hagamos con una lijadora eléctrica, que hace el trabajo mucho más fácil y rápido. Así, existen distintos tipos de lijadoras, entre las que destacan la orbital (que es la más común), la excéntrica, la de banda (para grandes superficies) y la delta (más pequeña y ligera).
En cuanto a las lijas, es importante conocer que, lo fundamental a la hora de escoger la adecuada, es tener en cuenta el grosor del grano (que puede variar desde 40 a 400), de manera que, cuanto más elevado sea el número, el papel de lija será más fino. De este modo, las lijas más gruesas harán un trabajo más basto, y las más finas trabajos más delicados, por lo que estas se suelen emplear para los remates finales.
Imprimaciones. La imprimación es un material empleado para la preparación de la superficie que, con posterioridad, va a ser lacada, pintada, barnizada.. Sus funciones principales son sellar, fijar, aislar y proteger la superficie.
En el caso de la madera, la principal finalidad de la imprimación es facilitar la adherencia de la pintura. Aún así, antes de aplicarla debemos lijar bien la superficie, y, si es necesario, aplicar decapantes. La imprimación, por tanto, es el paso previo a la pintura.
Existen distintos tipos de imprimación, en función del material que vayamos a cubrir (metal, vidrio madera..). Así, por ejemplo, para materiales de difícil adhesión, como la melamina, emplearemos una imprimación todo-terreno. Por su parte, también podemos elaborar una especie de imprimación casera a partir de pintura vinílica blanca y cola blanca.
Brochas y pinceles. Es importante saber que, en función de la superficie y el producto a aplicar, necesitaremos un tipo concreto de brocha o pincel. Así, uno de los factores a tener en cuenta es el tipo de cerdas, pues, para pinturas al agua o vinílicas, es mejor emplear brochas de cerdas sintéticas.
Por su parte, también encontramos distintos tipos de pinceles: de punta redonda (para detalles), cuadrado, plano, abombado, pincel ancho (para barnizar)..
Espátulas y decapantes. En ocasiones, solo con lijar conseguimos eliminar las primeras capas de pintura de un mueble. Sin embargo, a veces, la dureza de las mismas hace necesario aplicar un producto decapante químico, que cuartea la pintura o barniz. Así, una vez realizado, con ayuda de una espátula retiraremos los restos.
Pinturas. Existen muchos tipos de pinturas que se pueden emplear sobre madera: esmaltes sintéticos, pinturas plásticas, pinturas ecológicas, acrílicas, pinturas al aceite, lacadas, vinílicas.. Sin embargo, las más empleadas para madera son los esmaltes, que pueden tener acabado mate, satinado o brillante, y el lacado, que consigue una superficie brillante,
Otros materiales
Estropajos de lana de acero. Este material se puede emplear para realizar un lijado o decapado suave. Además, también podemos emplearla para obtener un acabado envejecido en la madera.Producto anticarcoma. En los muebles viejos es posible que nos encontremos con el inconveniente de la carcoma, que descubrimos a partir de pequeños agujeros que aparecen en la madera. Así, para eliminarla, deberemos inyectar con una jeringuilla un producto anticarcoma en cada agujero, forrar el mueble con plástico y dejarlo unos días.
Tapaporos. Este tipo de producto sirve para preparar e impermeabilizar la madera, y se aplica antes del barnizado. No dudes en comentarnos qué te ha parecido restaurar muebles II.
Agradecimientos: Imágenes de facilisimo.com/Cayeluci, Parksinta y John_a_ward/Flickr