Son tres consejos muy distintos entre ellos, pero que todos tienen en común que mejoran el aspecto de nuestras paredes, que es para lo que hacemos todas las tareas de bricolaje, para conseguir un hogar lo más agradable posible. Desde quitar el gotelé hasta limpiar los rodapiés para terminar con un mosaico decorativo. Después de revisar todas estas ideas, de seguro vas a tener mejores cosas en mente para practicarlo en tu hogar.
Lo primero de todo es hablar sobre cómo eliminar el gotelé de vuestras paredes, una técnica muy popular hace unos años, pero que tal y como nos comentáis muchos usuarios, parece estar obsoleta y queréis sustituirla por otras. Pues es muy sencillo, ya que solo necesitaremos una espátula, un pulverizador con agua, una lija para el acabado y en caso de que la pared esté deteriorada y sea muy fina, daremos una capa de aguaplás de renovación.
El primer paso será humedecer la pared con el pulverizador, sin miedo a pasarnos ya que debemos reblandecer la superficie para que sea fácil de retirar. Es mucho mejor hacer esto por partes, ya que se nos puede ir secando.
Con una parte ya mojada es momento de utilizar la espátula, apretar fuerte contra la pared y empezar a retirar el gotelé. Son movimientos enérgicos para retirar la gruesa capa entera. Esto lo repetiremos hasta completar la pared al completo.
Ya tenemos retirado todo el gotelé y en el caso que os mostraremos en el vídeo es una pared bastante deteriorada y que antes de que volvamos a pintarla hay que aplicarle una capa de aguaplás, lo que aportará un grosor de 4 milímetros y no habrá riesgos de fisuras en la pared. Para esto es importante también apretar fuerte y así evitar que nos queden grumos que puedan dificultarnos el nuevo pintado. Dejaremos secar 12 horas.
Por último, hay que dejar la pared lista para pintar de nuevo, utilizando cualquier técnica de pintura posible, y para ello hay que echar mano de dos lijas, ya que al principio pasaremos una lija un poco más gruesa para terminar con una lija fina que nos permita un acabado perfecto. Y ya tenemos la pared lista para disfrutar de otra pintura. Importante que antes de pintar pasemos un trapo y eliminemos las impurezas que puede haber dejado retirar el gotelé.
En este vídeo podéis ver los pasos que hemos seguido:
Hemos visto cómo quitar el gotelé y el paso posterior es pintar, pero a veces nos olvidamos de que para hacer todas estas tareas conviene proteger las zonas que no vamos a utilizar para que no se manchen. Por si ya es demasiado tarde y tenéis manchas de pintura en los rodapiés, una zona muy expuesta a que les caiga la pintura, voy a daros un truco para eliminarlas.
Un consejo que es mucho más fácil de lo que pensáis y es que en ocasiones nos volvemos locos buscando productos quitamanchas cuando la solución está mucho más cerca de lo que pensamos.
Podemos recurrir al aguarrás o incluso al alcohol para que se vayan estas manchas de pintura, pero simplemente CON AGUA las haremos desaparecer. Bastará con humedecer una bayeta y frotar enérgicamente sobre la zona afectada, siempre y cuando sea una mancha relativamente reciente, no suele ser efectiva para manchas antiguas.
Si no me creéis, en este vídeo tenéis la demostración de que con agua diremos adiós a las manchas de pintura en los rodapiés.
Ya hemos visto la manera de quitar el gotelé y preparar la pared, también la de limpiar las manchas que deja y ahora os voy a enseñar un truco para decorarla ayudándonos de un material reciclado como el poliestierno expandido (poliespán).
Se trata de hacer un mosaico de cuadros que den un toque de color a nuestras paredes a la vez que aportan originalidad a la decoración. Necesitaremos unos cuadrados de este material de 30 centímetros de ancho por 30 de largo, tela de diferentes colores para cubrirlos y alfileres.
Lo primero será recortar los cuadrados de las planchas grandes de poliespán que podemos encontrar en cualquier tienda de bricolaje a precios muy económicos. Para estos cortes podemos utilizar un cuttter, aunque si no está bien afilado también podemos usar un cuchillo que no sea de sierra y así evitar que se descorchen los bordes.
El siguiente paso es cubrir estos cuadrados con las telas que hayamos elegido, llegando a bordear toda la superficie y un par de centímetros por cada lado en la parte trasera. Para fijar la tela al poliespán solo necesitamos unos alfileres ya que es una superficie sobre la que se clava muy bien.
Ya tenemos los cuadros hechos, que dependiendo del espacio del que dispongamos serán más o menos. Para colgarlo en la pared clavaremos dos alfileres por cuadro en la pared dejando uno o dos centímetros de separación y pondremos los cuadros sobre los alfileres con un suave empujón.
Al pesar poco no hay riesgo de que los alfileres no soporten el peso y por tanto durarán eternamente en la pared. Una idea muy sencilla y original que podéis ver en este vídeo:
Estos han sido tres prácticos consejos que espero os hayan gustado y que si los aplicáis, nos comentéis como ha sido la experiencia en nuestro muro de facebook. ¡Os esperamos!