Un fantástico ejemplo es el de nuestro lector Javierja2000, que ha convertido la puerta de entrada de una casa en una descalzadora, con un estilo clásico y sobrio que nunca pasa de moda. El artista la hizo así con mucha intención, ya que se inspiró al ver unos asientos medievales sin respaldo en fotos de castillos. Es un trabajo muy original y del máximo interés, que seguiremos paso a paso.
Aquí tenemos la espléndida tarea finalizada, una hermosa descalzadora. A nuestro amigo Javierja2000 le gustaron mucho en las fotos de castillos las ventanas con un asiento delante, por eso rápidamente quiso comprobar el acierto de su diseño. La puerta que le regaló su amigo era de pino de Riga, una madera de gran calidad estética y con buenas aptitudes para la duración.
"Metido ya en el trabajo estuve cortando las maderas, unas de forma curvilínea para las patas, y otras rectas con un canal para alojar las lamas que conformarán el asiento", explica Javierja2000.
Aquí podemos apreciar el rebaje efectuado. "Como en esos momentos no disponía de fresadora que me facilitara el trabajo, tuve que hacerlo a la antigua usanza, o sea, marcar las profundidades de corte y... dale que te pego al formón y al martillo".
Nuestro amigo tuvo que hacer con los mismos utensilios los rebajes en las patas para los listones, con la dificultad añadida de la forma curva. Y ya tenemos montada la estructura del mueble.
Comienza la fase de colocación de lamas en el mueble, alojándolas en las canales practicados.
Nuestro amigo nos comenta una rectificación en el diseño. "El armazón carecía de travesaño de refuerzo en la parte inferior, pensé que no era necesario pues la estructura estaba pegada con cola blanca y tubillones en cada una de sus uniones y estuvo pegándose durante todo un día sólidamente apretada con unas sargentas que impelen gran potencia... pero me equivoqué. Y aquí está el resultado"
"Bien, repuesto del desastre, aquí les dejo el trabajo terminado y con travesaño". Sin duda esta equivocación fue una enseñanza de carpintería muy provechosa.
"Como la madera estuvo mucho tiempo a la intemperie, una vez que tuve montado la totalidad del mueble, le di un buen lijado y dos manos de barniz color caoba. En la primera traté de darle un color uniforme a toda la madera ya que se veían distintos tonos en la madera (aún así hay distintas tonalidades) y en la segunda corregí errores pues la hice con el barniz un poco más espeso".
Aquí vemos otra posible utilidad de la descalzadora. ¡Felicitamos a Javierja2000 por el magnífico trabajo!