Hace tiempo llegó a mis manos una estructura de hierro fundido perteneciente a una maquina de coser de los tiempos del charlestón, allá por los años 20 del siglo XX, decidí renovarle el aspecto y convertirla en una mesita auxiliar para el salón manteniendo un poco su tradicional diseño.
No es una restauración en toda regla pero si una forma de aprovechar un mueble que ya no cumple su objetivo original. Y aquí tenéis el paso a paso para conseguir un buen resultado en este trabajo.
Lo primero para un buen resultado es desmontar todas las piezas clasificándolas bien y tomando nota de la posición de cada una así como de los tornillos. Mucho cuidado, al ser de hierro fundido se puede romper la estructura con un golpe mal dado, así que espray aflojatodo, herramientas adecuadas a cada tornillo y paciencia...mucha paciencia.
antes de empezar
A continuación se limpia bien cada pieza para eliminar restos de pintura y oxido, con ayuda de un taladro y algunos cepillos de alambre se avanza mas rápido y mejor aunque en las esquinas y rincones (y estas estructuras tienen muchos) hay que usar cepillos manuales y alguna rasqueta y punzón. Una vez más paciencia hasta conseguir el acabado perfecto. Después de limpiar cada pieza se pinta al gusto, yo he usado pintura acrílica mate que le da un aspecto muy elegante.
limpiando la estructura
Un detalle que he variado sobre la original son las ruedas, estas suelen ser de hierro y sujetas con un pasador remachado, se lima una punta del mismo y con ayuda de un botador salen sin problema (ojo con los golpes) sustituyo las ruedas por unas de plástico de medidas similares para que después la mesa no raye el suelo.
detalle de la rueda
Para el sobre de la mesa me decido por algo tradicional con un ala abatible en madera de pino y un par de cajones. Con listones de madera hice las guías por donde se desplazan los cajones, un recurso típico de carpintería de la época. Con madera de contrachapado se hacen las cajas a la medida deseada y en la parte superior de cada lateral se clavan unos listones que encajaran en las guías.
Con madera del mismo tipo que el sobre de mesa se hacen los frentes de los cajones, al cortar estos frentes un par de centímetros mas altos que el cajón se consigue que sobresalgan un poco por debajo y así se puede manipular una vez montado sin necesidad de ponerle tirador.
detalle de las guías de cajones
El ala abatible también es de la misma madera que el sobre y se sujeta sobre este con dos bisagras por su parte inferior; con un listón y una bisagra se hace el soporte para que el ala quede abierta, en la posición de abierto el listón se apoya sobre un resalte que tiene la estructura.
ala abierta y soporte
Y este es el resultado del trabajo, una practica y bonita mesa para un rincón de nuestro hogar.
resultado final
Para quien se atreva a acometer algún trabajo semejante le recomiendo primero que se documente sobre el diseño original ya que le dará muchas ideas para comenzar; segundo que toda la paciencia del mundo es poca, se trata de hacerlo bien no rápido y tercero que se atreva y disfrute del trabajo tanto como del resultado.
con el ala abierta
Bonito, fácil y barato no hay excusa para no hacerlo.