¿Para qué sirve? La imprimación sirve para preparar una superficie que vaya a ser pintada con posterioridad, ya que facilita la adhesión. Las principales funciones de la imprimación son la selladora, la fijadora, la aislante y la protectora.
¿En qué superficies se aplica? La imprimación se puede aplicar en cualquier superficie que deba ser preparada para la pintura. Así, podemos aplicarlo sobre plástico, melamina, PVC, hormigón, metales como el acero o el aluminio y la madera. En función del material, hablaremos de un tipo de imprimación o de otro, y de una función o de otra.
En los metales, la imprimación se utiliza para prevenir el óxido y la corrosión. En el caso de la madera, tiene efecto sellador. Por su parte, cuando hablamos de fachadas de hormigón, podemos entender la imprimación como un repelente de las humedades.
Consejos para su aplicación. Antes de aplicar la imprimación,hay que saber que la superficie debe estar completamente limpia y, en caso de ser necesario, decapada. Además, también es importante tener en cuenta que no todas las superficies que vayamos a pintar necesitan recibir una capa de imprimación e, incluso, que muchas pinturas vienen con ella incorporada. Un truco para saber si se necesita imprimación es pintar una pequeña zona, esperar a que se seque, y luego comprobar si la pintura se 'despega'.
Eso sí, en la mayoría de las restauraciones sobre madera, lo más común es que tengamos que decapar la misma, eliminar las impurezas y aplicar la imprimación.
¿Qué más datos aportaríais sobre la imprimación?
Imagen: Shaire Productions/Flickr