- El primer paso y fundamental será el lijado, pues lo normal es que no estén en muy buen estado y tengan alguna astilla. En función del estado de la madera usaremos una lija más fina o más gruesa, aunque lo normal es que con un papel de lija de grano fino sea suficiente para hacer las estantes con cajas de fruta.
En el caso de que queramos dejar las cajas en el tono de la madera, con una capa de barniz final, emplearemos lijas más gruesas para eliminar la pintura, letras o marcas que tenga la caja.
- Por otro lado, algunas cajas de la fruta están unidas mediante grapas, lo que no solo resulta antiestético, sino que, además, puede provocarnos algún daño si se usa de forma habitual como estante, archivador... Por ello, lo que podemos hacer es extraer las grapas y unir la caja con clavos, que son mucho más sencillos de disimular.
- A continuación, en caso de ser necesario repararemos los posibles desperfectos que pueda tener la caja, como arañazos, picotazos... Para ello podemos emplear masilla para madera, que aplicaremos con ayuda de una espátula. Después, una vez seca, tendremos que volver a lijar para reparar.
- Fundamental también es que las cajas tengan un buen nivelado, es decir, que al poner unas sobre las otras no cojeen. En caso contrario, deberemos nivelarlas una a una, bien lijando o bien incorporando altura en alguno de los lados, por ejemplo, incorporando una pequeña pieza de contrachapado bajo la caja para estabilizarla.
- Cuando ya las tenemos todas listas, procederemos a pintarlas. No será necesario aplicar una imprimación pues, como hemos dicho, se trata de madera sin tratar. Así, podemos emplear esmaltes acrílicos.
- Por último, iremos probando diferentes opciones hasta dar con el resultado deseado. Lo normal es que con el propio peso de las cajas se sostengan bien y no sea necesario unirlas, lo que facilita la tarea de ir renovando cada cierto tiempo la estructura de la estantería.
Foto: facilisimo.com/May_flo
Sin embargo, si queremos asegurar bien los estantes con cajas de fruta, podemos reforzar la unión con clavos o cola de carpintero. Además, también podemos fijarlas a la pared, para que no se tambaleen. O, siguiendo el ejemplo de Nashsa, cuadrarlas todas en una estructura perfecta, unirlas en la parte superior con una tabla de madera que haga de encimera, y colocar ruedas en la parte superior para hacerla más transportable. Además, en la parte inferior también podemos poner una tabla que ocupe todo el ancho de la estantería para mejorar la estabilidad.
Otra posibilidad es colgarlas en la pared. Para ello, si son cajas pequeñas que no van a soportar mucho peso, nos servirá la cinta de doble cara de alta resistencia.
Foto: facilisimo.com/MyLittleBrunch
Otras ideas para reciclar cajas
Podemos decorarlas con todo tipo de técnicas y emplearlas, por ejemplo, como bandejas, tal y como realizó Cllivia.
Otra opción es colgarla de la pared a modo de estante. Así es como lo hizo Cosasmias27.