A la hora de decorar nuestro hogar con muebles y objetos elaborados por nosotros mismos podemos recurrir al reciclaje. De esta forma conseguiremos un estilo único y de una forma muy económica. Así, uno de los elementos más empleados y reciclados en el mundo de la decoración son las cajas de madera empleadas para la guardar y transportar la fruta. Bien tratadas y acondicionadas, pueden convertirse en perfectas estanterías para cualquier espacio de la casa.
Por su parte, este tipo de cajas están hechas a partir de una madera no tratada, lo que facilita muchísimo trabajar con ellas. Así, los pasos principales que debemos seguir son:
1 En primer lugar, la limpieza. Hay que preparar el material antes de empezar a trabajar con él, y para ello debemos retirar todas las etiquetas y pegatinas que tenga con ayuda de agua caliente, así como el polvo que pueda tener, para lo que emplearemos un paño húmedo.
2 Después tendremos que lijar, para eliminar desperfectos, restos de pegatinas o marcas, astillas...
3 Por su parte, podemos retirar las grapas que unen las diferentes piezas y sustituirlas por otros elementos como, por ejemplo, clavos, que son más seguros.
4 Después ya podremos pintar y decorar con elementos como, por ejemplo, washi tape, papel pintado...
5 Para terminar, podemos aplicar una capa de barniz para dar brillo y proteger la superficie.
6 Una vez las tenemos lista, podemos colocarlas sueltas, jugando con la composición y el diseño, o unir unas cajas con otras mediante cola blanca, cinta adherente, fijarlas a la pared...
Además, podemos añadirles otros elementos como ruedas, luces.
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