Muchas veces insistimos en que la decoración de un dormitorio infantil debe conseguir crear un ambiente alegre y agradable, en el que los niños se sientan cómodos y, además, se diviertan. Y, respecto a esto último, qué mejor que instalar en sus dormitorios uno de los juegos preferidos de cualquier niño: los columpios.
Además, fabricarlos nosotros mismos no implica ningún tipo de complicación. Solo necesitaremos contar con una tabla, cuerda, y unos eslabones para sujetarlo al techo de forma más segura.
De este modo, pasaremos la cuerda por el eslabón, calcularemos el largo que dejaremos en función de la altura del techo, anudaremos bien los extremos para unir las dos mitades de la cuerda y pasaremos cada uno de los extremos por los agujeros que habremos realizado en las esquinas de la tabla. Después, ataremos bien por debajo del asiento y recortaremos la cuerda sobrante. Repetiremos el proceso con el otro lado.
Eso sí, lo primero es que comprobéis el tipo de techo que tenéis y si resistirá el peso. En cualquier caso, en una ferretería podéis adquirir los herrajes adecuados en función del material que conforme el techo. Por su parte, si tenéis vigas descubiertas, lo mejor es colgar el columpio de ellas o, en cualquier caso, detectar donde se encuentran las vigas del techo y colgar el columpio de ellas, pues de esta forma nos aseguramos la resistencia. Además, en este reportaje podéis encontrar algunas claves básicas para colgar objetos de diferentes tipos de techo.
Por su parte, si no confiáis en la resistencia del techo, podéis emplear el columpio desde un punto de vista decorativo como, por ejemplo, como mesilla, o como un original estante para libros, peluches..
¿Qué os parece la idea?
Fotos: Papa Novato, Desde my hogar