A todos nos ha pasado alguna vez, llega un momento que te cansas del color de un mueble o, sencillamente, su estilo ya no va contigo. En muchas ocasiones, pensamos en sustituirlo por otro. Sin embargo, siempre existe la posibilidad de transformarlo, darle una segunda oportunidad. Con este post aprenderás algunas de las técnicas más habituales para renovar tus muebles sin tener que comprar unos nuevos.
Renovar tus muebles utilizando la técnica del decoupage La técnica del decoupage se desarrolló en Europa durante la Edad Media y el Renacimiento. Se puede emplear prácticamente con cualquier tipo de papel, aunque los más comunes son el papel de arroz o las servilletas decoradas.
Para renovar tus muebles con esta técnica, tan solo necesitarás un poco de cola y un bonito papel estampado. Podrás forrar la trasera de una librería o el frente de los cajones de una cómoda. Verás como este sencillo cambio le proporciona a tu mobiliario un aire totalmente distinto.
Prueba de ello es la siguiente cómoda de madera de pino cuyo aspecto ha cambiado radicalmente después de haber pintado algunos de sus cajones y de haberlos decorado con decoupage.
Estilo vintage con la técnica del decapado
La técnica del decapado o decapé consiste en pintar el mueble de uno o varios colores y lijar las zonas que suelen desgastarse de forma natural con el paso del tiempo. Cuando se emplean dos o más colores, se produce un efecto vintage que aporta solera y carácter a cualquier pieza de mobiliario.
Sin duda, la chalk paint o pintura a la tiza es la pintura idónea para realizar esta técnica ya que por sus características resulta muy fácil de lijar. Gracias a ella conseguirás darle un aspecto shabby chic o totalmente renovado a tus antiguos muebles. Si además lo combinas con un bonito tapizado o tela puede dar lugar a muebles únicos y con mucha personalidad.
Cambiar el color de tus muebles
Tan sencillo como dar un par de manos de pintura para cambiar el color de tus muebles. Un mueble oscuro puede llenarse de luz y parecer mucho más liviano tan solo pintándolo de blanco. También puedes proporcionarle alegría y vida a tu comedor pintando cada silla de un color distinto.
Con esmaltes y pinturas al agua esta tarea se hace sumamente sencilla, además de mucho más respetuosa con el medio ambiente.
En definitiva, si le das una segunda oportunidad a tus muebles:
- Reduces deshechos, porque ya no necesitas deshacerte de él
- Reutilizas tu viejo mueble
- Reciclas porque estás dándole un nuevo uso o un aire renovado
¿Necesitas más razones para proporcionarle una segunda vida a tus muebles? Seguramente no, pero aquí tienes una más: la satisfacción personal de haberlo hecho tú mismo. Con cualquiera de las técnicas indicadas anteriormente podrás conseguirlo y con un resultado que envidiable ¿te animas? Si necesitas más inspiración tan solo tienes que pasarte por Bricoydeco.com