1 Pintar los azulejos. Una posible opción para hacer un completo lavado de cara a vuestro baño es pintar los azulejos. Es una forma rápida y sencilla de dar un gran cambio. Para ello, hay algunos pasos clave, como limpiar y desengrasar la superficie, secar con un paño y aplicar dos manos de un esmalte sintético resistente al agua con un rodillo de espuma compacta.
2 Empapelar los muebles. Si no disponemos de mucho dinero para hacer nuestras reformas, el empapelado es una técnica perfecta para rejuvenecer los muebles que ya tenemos. Nuestra amiga Caprichosa24 ha hecho uso de esta técnica y ha obtenido este original resultado de un mueble que, antes de pasar por sus manos, era clásico y sencillo.
3 Evitar humedades. Existe una forma sencilla de evitar humedades en el baño que, como hemos dicho, es una de las zonas de la casa más húmedas. Consiste, básicamente, en revisar las juntas de los azulejos cada cierto tiempo, para poder rellenar las posibles grietas que vayan surgiendo.
4 Pintura antihumedades. Otra opción para evitar las humedades, en el caso de que vuestra pared no tenga revestimiento de azulejos, es emplear un tipo de pintura antihumedades, que impide la filtración y retención de las partículas de agua.
5 Poner un buen extractor de aire. El baño es una de las habitaciones de los hogares que más humedad retiene, lo que puede llegar a generar problemas como el moho si no tenemos una buena ventilación. Para ello, los extractores de aire realizan la función de renovar el aire interior. El tipo de extractor que instalemos dependerá del tamaño de la estancia, que nos dará una idea del volumen de aire que hay, que se calcula multiplicando el largo, por el ancho y la altura. Así, nuestro extractor debe proporcionar un caudal de aire entre siete y diez veces superior al resultado. Además, también tendremos que definir la potencia a partir del tamaño del baño.
6 Alicatar el suelo. Esta es otra de las tareas que nos pueden ayudar a proporcionar a nuestro baño o aseo un aspecto renovado y moderno. No es una tarea complicada, aunque requiere de cierto esfuerzo.
7 Restaurar el mueble del baño. Con el tiempo, los muebles que hemos elegido para nuestro baño quedan anticuados. Sin embargo, muchos están realizados prácticamente a medida y encajados en el hueco exacto, por lo que preferimos no cambiarlos. La opción más adecuada, en este caso, es restaurarlos. Si el mueble es de madera, siempre tenemos la opción de lijar, imprimar y pintar. Además, podemos añadir nuevos detalles como cambiar los tiradores, añadir una barra lateral para las toallas, poner un vinilo, o emplear alguna técnica de decoración como el decoupage o el estarcido.
8 Hacer los muebles desde cero. Los más habilidosos siempre tienen la opción de comenzar el mueble desde cero, adaptándolo a nuestro espacio y necesidades. Eso sí, no necesariamente tenemos que fabricarlo, pues podemos seguir el ejemplo de nuestro usuario Flynn, que decidió montar su propio mueble acoplando dos cajoneras.
9 Estante para el baño. Si algo es básico en el baño es el orden pues, normalmente, son habitaciones pequeñas que requieren de cierta organización para no agobiarnos. Por eso, una opción para cubrir los espacios libres es colocar estantes. Así, aquí recordamos algunas ideas como los estantes hechos de corchos de Adventures In Creating o los cestos convertidos en baldas que vimos en Oficina de Acervos.
10 Tunear el espejo. Por supuesto, el espejo es fundamental en cualquier baño. Así, un modelo original y llamativo puede convertirse en el mayor protagonista y en el centro de atención. Por eso, podemos realizar originales diseños, tunear el que tenemos, añadir un marco, poner un vinilo e, incluso, realizar grabados.
Agradecimientos: Fotografías de Lavenderstreak/flickr, (baño), facilisimo.com/Caprichosa24, La ferretería digital (extractor), facilisimo.com/Flynn, Adventures in Creating y Oficina de Acervos.