Para este tipo de casos, encontraremos en ferreterías y tiendas especializadas maletines muy completos que ya incluyen todo lo necesario para ponerse a trabajar. Suelen disponer de un kit básico de herramientas que es más que suficiente para solucionar los pequeños problemas que surgen en casa. Sin embargo, nunca viene mal conocer cuáles son los utensilios y materiales más necesarios, así como sus aplicaciones. Éstas son las piezas básicas que no deben faltar en tu cajetín de herramientas:
Destornillador Es un instrumento clave que debes tener en casa. Los muebles, los electrodomésticos, el ordenador, las maletas... todo tipo de objetos están ensamblados con tornillos, por eso es tan imprescindible. Sin embargo, necesitaremos diferentes destornilladores, de distintos tamaños y con diversos tipos de punta, que se adapten a la variedad de trabajos (electricidad, carpintería...) y a las clases de tornillos existentes. Tenemos modelos en el mercado mucho más versátiles, que incluyen puntas intercambiables. Los eléctricos son los más cómodos, porque no exigen apenas esfuerzo.
Taladro Esencial para hacer agujeros en paredes, muebles, etc. Necesitarás un modelo que incluya una buena variedad de brocas, adaptadas a los distintos materiales perforables (ladrillo, metal, azulejo, madera), y con diferentes tamaños. Un buen taladro, potente, eficiente y limpio (los hay que aspiran el polvo que producen), constituye una excelente inversión de la que no te arrepentirás.
Alicates Una de las herramientas más completas, que saca de un apuro a cualquiera en todo momento, aunque se utiliza esencialmente en trabajos de electricidad. Sirve, entre otras cosas, para cortar y pelar cables, así como desenroscar tuercas. El alicate universal es el más versátil: se compone de una pinza robusta, unas mandíbulas estriadas y una sección cortante. Imprescindible.
Martillo Otro de los útiles insustituibles. Como en todos los casos, existen diversos modelos, aunque el más básico es el de cuña, suficiente para hacer los trabajos más sencillos. Si te gusta montar muebles, no te vendrá mal un martillo de orejas, que sirve para quitar clavos. Los mazos se emplean también para martillar, pero con la ventaja de que no dañan los materiales porque se fabrican con caucho, madera o nylon.
Metro Para medir todo tipo de dimensiones, nunca viene mal tener una cinta métrica en el hogar, de al menos cinco metros. De entre los diversos instrumentos de medición, éste es el más fundamental, ya que se utiliza con muchísima frecuencia.
Llaves Un buen juego de llaves, de distintos tamaños, es muy útil para desenroscar tuercas, ya no sólo en casa, sino para pequeñas reparaciones mecánicas del coche. Si no queremos adquirir un juego completo, siempre podemos recurrir a la tradicional llave inglesa, que se adapta al tamaño de cualquier tuerca.
Tornillos, tuercas, clavos, escarpias, tacos, alcayatas, tirafondos y grapas Se compran individualmente o en bolsas y son muy baratos, por eso no pueden faltar en cualquier vivienda. Se usan en todo tipo de situaciones, así que conviene tener una amplia gama de cada uno de ellos. Los tornillos, los tirafondos y las tuercas sirven para fijar, ensamblar y asegurar sujeciones. Los tacos, escarpias y alcayatas se aplican sobre todo para colgar elementos de las paredes (percheros, cuadros, relojes, espejos). Las grapas sujetacables permiten ajustar en esquinas y recovecos todos los cables que se desperdigan por la casa. Así los quitamos del paso y conseguimos disimularlos.
Pegamento Los adhesivos universales son los más habituales en el hogar, porque son útiles en cualquier ocasión y pegan cualquier tipo de superficie. Debes tenerlos siempre a mano en tu vivienda. Para casos más concretos, existen adhesivos específicos que te ofrecerán excelentes resultados.