Hoy estaremos describiendo estas increíbles formas de apertura en ventanas y puertas, tomen nota de estos estilos.
A la hora de elegir formas de apertura en ventanas y puertas, uno de los aspectos importantes a tener en cuenta es la manera en la que se abren. En primer lugar y lo más importante de todo es diferenciar entre dos grandes tipos, cada uno de ellos con distintos subapartados: los sistemas practicables y los sistemas deslizantes. Elegir uno u otro dependerá de lo que queramos lograr y del espacio del que dispongamos.
Formas de apertura en ventanas y puertas practicables es la mas comun de todas.
La apertura practicable es la más común y la que por lo general aporta mejores niveles de aislamiento gracias a su cierre estanco. Su inconveniente es el espacio que ocupa la hoja al abrirse ya que abre en distinto plano que el marco.
Dentro de los sistemas practicables tenemos, además, los de giro vertical, los abatibles o de giro horizontal, los oscilobatientes (combinación de ambos) y lo de apertura pivotante o giratoria.
Ventanas y puertas deslizantes
Los sistemas deslizantes (o correderas) en general tienen la ventaja de que permiten ahorrar espacio ya que no necesitan hueco ”extra” para abrirse (se abren sobre el mismo plano en el que están). El principal problema que tienen es que, debido al cierre de “cepillo” que suelen tener, son menos aislantes que los sistemas practicables. Aunque actualmente hay sistemas deslizantes que no tienen este handicap, sino más bien al contrario.
Así, dentro de este tipo tenemos los siguientes: corredera tradicional, corredera oscilo-paralela, corredera-elevadora y plegable.
Aquí podéis encontrar más información sobre cada una de ellas..