Pensado y manos a la obra, con una plancha de corcho blanco (poliestireno expandido) del que se usa en las obras, corcho, cartón y pintura hice este divertido photocall que recuerda a las redes sociales más conocidas y que se puede usar tanto de forma fija como portátil para que todos liberen su alegría y tengan su foto exclusiva.
La construcción es muy sencilla, primero se recorta una ventana del tamaño deseado sobre el corcho con una cuchilla o cutter bien afilado.
A continuación se forra con cartón, unas cajas de electrodomésticos son ideales para ello, con el fin de darle rigidez y pueda soportar todo el trajín que va a llevar. El cartón se pega fácilmente con un adhesivo multiuso que no tenga disolvente, ya que este componente disuelve el poliestireno.
Una vez seco el pegamento llega la hora de decorar, aquí la imaginación manda, yo decidí simular las pantallas de dos redes sociales bastante conocidas, una por cada cara del invento, primero una mano de pintura blanca y después la de los colores elegidos ya que el blanco es mejor soporte para posteriores decoraciones.
Ya pintado y seco se añaden dibujos o pegatinas y texto al gusto, sin recargar demasiado pues en la sencillez está la gracia.
El resultado es un marco ligero y resistente que se puede usar colgado del techo, apoyado en algún mueble o sostenido con la mano para que cada uno de rienda suelta a su albedrío y consiga un recuerdo exclusivo.
Bonito, barato y fácil de hacer, y a decir de quien lo disfrutó muy pero que muy divertido. Ademas que por los materiales y herramientas necesarias es ideal dejar colaborar a los más pequeños de la casa y así iniciarlos en las manualidades y el bricolaje.