Debajo donde coloqué el espejo hay una puerta que esconde las llaves de paso del agua y para darle un aire distinto y más gracioso, hice un pequeño dibujo de un ratón.
Este fue el resultado:
de puerta de armario a espejo recibidor
El proceso fue:
- Pasar una lija suave por la madera.
- Barnizar a muñeca con un barniz brillo. Necesitó dos manos.
- Para el recuadro interior pinté con esmalte blanco roto envejeciéndolo un poco con betún de judea y pintando los tornillos con marrón oscuro para resaltarlos.
- El marco central que está entre los dos marcos de madera estaba un poco feo, por lo menos a mí no me gustaba, así es que como tenía un retal de piel sintética sobrante, decidí recubrirlo. Primero hice un patrón con cartón para ver las medidas. Después lo puse sobre la tela y fui cortando y con mucho cuidado pegando con cola especial para textil procurando que no me quedaran burbujas y para eso hay que ayudarse de un trapo para ir presionando encima a la vez que vas pegando.
El resultado quedó muy bonito aunque hay que tener paciencia, si no deseáis complicaros con tela también podéis utilizar papel adhesivo o simplemente pintándolo.La puerta que esconde las llaves de paso del agua estaba barnizada y no quise tocarla, pero para darle un aire un poco más gracioso, dibujé a mano un pequeño ratón. Utilicé pinturas acrílicas y pinceles finos.
os ha gustado la idea?