Hola amig@s y bienvenidos a un nuevo post de Diyambo. En este post veremos diferentes tipos de ensamblajes usados en el mundo de la carpintería, que os serán de gran utilidad a la hora de trabajar con este noble material conocido como "Madera".
Aunque existen multitud de ensamblajes y debido a la dificultad que presentan muchos de estos ensamblajes y a lo extenso que sería el post, he decidido desarrollaros los más prácticos y sencillos.
Si os interesa que desarrollemos más tipos de ensamblajes o de ferretería de ensamblaje sólo comentármelo al final del post y así lo haremos. Esperamos que os sea de utilidad.
1-. "Encolado y claveteado" y "Encolado y atornillado".
Son dos sistemas muy parecidos, así que los encasillaremos en el mismo grupo. La única variante obvia es la de usar clavos o tornillos.
Este sistema de ensamblaje es el más sencillo de todos ya que no requiere ningún trabajo de corte. Para ejecutar este sistema se encolan las dos caras que estarán en contacto (con cola blanca). Tras su unión, se fijarán las piezas hasta hasta que la cola halla secado ,mediante sargentos ( El tiempo de secado deberá venir indicado por el fabricante en el envase). Para reforzar la fijación a la tracción, se reforzará la unión usando clavos o tornillos que fijen las dos piezas.
Con clavos, enrasaremos las caras a unir, marcamos la mitad del canto de A sobre B, lo que nos dará el eje para atornillar o clavar. Si usamos clavos colocaremos dos, uno en cada extremo, de manera que tendremos perfectamente alineadas las dos piezas y podremos seguir colocando clavos ( tantos como necesitemos).
Con tornillos, debemos alinear las dos piezas, realizar un taladro en cada extremo (con broca de igual medida a nuestro tornillo), colocaremos los dos tornillos y tras comprobar que las piezas están alineadas seguiremos realizando tantos taladros y colocando tantos tornillos como necesitemos.
2-. "Ensamblajes de media madera" y "Ensamblajes con espiga (o tarugo)".
Ensamblaje a media madera:
Este tipo de ensamblaje es usado en la fabricación de marcos o en la unión de elementos tales como pérgolas de jardín, estructuras, etc. Es sencillo de ejecutar y aporta una buena fijación estructural. Existen tres subtipos:
Ensamblaje con espiga (o tarugo):
Este tipo de unión es de los más comunes. Suele usarse para el ensamblaje de muebles o cualquier otro utensilio que pueda desmontarse y no necesitará del aprendizaje de complicadas técnicas de carpintería. La espiga es una clavija redonda. Se perforan las dos piezas a unir mediante broca y taladro. Se introducirá la mitad de la longitud de la espiga en cada pieza y, las piezas quedan ensambladas. Aunque cuidado, ya que el sistema de ensamblaje por espigas necesita del apoyo de algún otro sistema de fijación, tales como cola blanca o de carpintero, clavos o tornillos, ya que sin este apoyo las piezas quedaran ensambladas pero no fijadas. Si se desea que el sistema sea desmontable, recomiendo el uso de tornillos.
Es un procedimiento sencillo a simple vista. Sólo presenta una dificultad, la de realizar los taladros en ambas caras y que encajen las piezas. Para ello os aconsejo que si usáis este sistema, lo realicéis en cuatro pasos. Primero: realizar los taladros en la pieza A. Segundo: colocar punzones de centrado en todos los taladros realizados en la pieza A. Tercero: Colocar la pieza B en si posición definitiva sobre la pieza A y los punzones de centrado. Cuarto: golpear con una maza o martillo sobre la pieza B de manera que los punzones de centrado marcarán el centro de los taladros que debemos realizar en la cara B y nos aseguraremos que nuestras piezas encajarán perfectamente.
3-. "Ensamblaje mediante galletas y engalletadora".
Éste método en particular es uno de mis favoritos. Requiere el uso de una herramienta específica llamada engalletadora o de un mecanismo que permite que se le acople una amoladora.
Colocaremos las dos piezas a unir en la posición en la que finalmente quedarán ensambladas y haremos marcas en ambas piezas en los puntos a perforar. Esas marcas nos servirán de referencia para colocar nuestra engalletadora, que dispone de una muesca que alinearemos con las marcas de las piezas y nos realizará la muesca en la madera totalmente centrada, donde se alojará la "galleta" cuya función es similar al del tarugo o espiga. Se encolan con cola blanca las muescas realizadas en las piezas, se introduce las galleta la pieza A dejando la mitad de la galleta fuera de la pieza. Se encolan la superficie de contacto y se coloca la pieza B, encajando la mitad de las galletas de A en las muescas de la pieza B y se golpea suavemente uno de los extremos de la pieza A o B hasta que apenas se distinga junta entre A y B. Limpiaremos el sobrante de cola y fijaremos la unión mediante sargentos, retirándolos uno vez halla secado la cola.
Éste método tiene varias ventajas respecto al ensamblaje por espiga o tarugo. Una de las principales ventajas es que debido al escaso grosor de las galletas permiten su uso en perfiles menos gruesos. Si sueles construir muebles, este método será uno de tus indispensables.
Estas son unos cuantos de los ensamblajes más usados en trabajos de carpintería. Existen muchos más y de mayor dificultad. Si os gusta la carpintería y queréis dar el paso y realizar vuestros primeros diseños, estos ensamblajes os serán de mucha utilidad.
A la hora de llevar a cabo cualquier tipo de proyecto vuestras únicos límites serán vuestra imaginación, constancia y ganas de trabajar.
Todos los tipos de ensamblajes serán compatibles los unos con los otros, pudiendo realizar diferentes ensamblajes en un mismo mueble por ejemplo.
Pues hasta aquí esta pequeña introducción al mundo del ensamblaje en carpintería. Espero que os halla gustado y que os sea de utilidad.
Un saludo y espero vuestros comentarios.