Seguramente tengamos por casa algún objeto de forja que pertenecía a nuestros padres o abuelos, o algún mobiliario de exterior que con las lluvias y el calor se ha deteriorado. Si queréis restaurarlo, en este post os lo explicamos paso a paso.
Los materiales que necesitaréis son:
- Limpiador de óxido
- Pincel
- Brocha
- Estropajo de lana de acero
- Pintura
- Espátula
- Decapante
- Disolvente
- Barniz
Los pasos para restaurar forja son los siguientes:
1. En primer lugar tenemos que limpiar el objeto para poder ver los desperfectos que tiene. Lo lavaremos con agua y jabón.
2. En algunos casos los desperfectos son mínimos. En si este es uno de esos casos, lo recomendable es observar detenidamente el objeto en pro localizar las imperfecciones a erradicar, como: falta de pintura en áreas puntuales y, con un color similar al original del objeto, pintar las imperfecciones ubicadas velando que se fusione con el resto de la pintura y no sea tan perceptible las diferencias. Para que no se noten los bordes, podemos lijarlo antes para suavizarlo.
3. Si por el contrario la pintura está muy estropeada, tendremos que decapar. Con esto conseguimos que la pintura , laca o barniz se ablande y sea más fácil quitarlo. Aplicamos una buena capa y esperamos unos 15 minutos hasta que se empiecen a formar arrugas y burbujas en la superficie. Lo quitamos con una espátula.
4. Una vez decapado, retiramos los restos con un estropajo de lana de acero mojado en disolvente y lo dejamos secar.
5. Ahora bien, es muy importante aplicar un limpiador de oxido previo a iniciar el proceso de pintura, ya que esto permitirá remover las áreas oxidadas del objeto en cuestión (en caso de que las haya) y optimizará la adhesión de la pintura a la forja.
6. Por último aplicamos la pintura. Primero una capa con unas gotas de disolvente, y una vez seco le damos otra capa más sólida.
Si el objeto restaurado va a estar en exteriores, se le puede dar una capa de barniz para que se conserve mejor. ¡Y ya lo tenemos listo!
¿Qué os ha parecido?
Imagen: facilisimo.com