Habitualmente, compramos brochas o pinceles nuevos para pintar nuestra casa o cualquier objeto y después de terminar nuestra tarea las guardamos simplemente, encontrándolas rígidas y duras cuando volvemos a querer utilizarlas, después de un tiempo. El mantenimiento de los pinceles es fundamental, si queremos que nos duren cierto tiempo, por lo que hoy os propongo algunas estrategias para tener los pinceles y brochas en buen estado.
Muchos sufrimos por este problemas así que por eso traemos estas estrategias para tener los pinceles y brochas en buen estado.
Lo mejor es preparar el pincel desde que lo compramos. Para ello, debemos meter sus cerdas en agua hirviendo dejándolas durante unos minutos. Así conseguiremos que tengan mayor adherencia, esta es un de las principales estrategias para tener los pinceles y brochas en buen estado.
Una vez que utilizamos la brocha, cuando terminamos, el primer paso es retirar la capa gruesa de pintura, simplemente pasando el pincel por encima de una superficie, como si estuviéramos pintando (papel de periódico, por ejemplo). Después, tendremos que tener en cuenta el tipo de pintura para poder eliminar los restos que quedan.
En caso de que se trata de pintura al agua o colas blancas, nos bastará con un poco de agua y jabón. Para las pinturas sintéticas, plásticas o barnices, necesitaremos algún tipo de disolvente, pero debemos mirar siempre las instrucciones de uso en el bote de pintura. Por último, solo nos queda dejarlas secar en un lugar con buena ventilación.
¿Qué trucos tenéis vosotros?
Imagen: ambhersttimes.com
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