Esta entrada la tenía pendiente desde hace ..... mucho tiempo. Cuando publiqué la mesilla tuneada, ya os decía que tenía un lote de muebles antiguos que una amiga me había pedido que restaurara. Este sofá es el segundo del lote y todavía queda una cómoda, pero al paso que voy, quizás en verano la publicaré. Suerte que mis amigos no tienen prisa!
Quizás hace más de 6 meses que empecé el trabajo de restaurar este sofá, pero entre unas cosas y otras, pues, hasta ahora.
Es la primera vez que hago un trabajo de este tipo. Restaurar, tunear y pintar lo he hecho muchas veces, pero restaurar toda la tapicería y el relleno de un sofá, nunca. He aprendido mucho, mucho, pero claro, esto también ha hecho que tardara tanto tiempo. He de dar las gracias a Gemma de El taller de lo antiguo por su ayuda.
Como no sabía que iba a encontrarme, y tampoco si sería capaz de volver a montarlo, hice un montón de fotos de todo el proceso de desmontaje. El sofá estaba hecho una pena, pero por suerte, no le faltaba nada. Bueno sí, un trozo de pata y uno de los adornos redondos del respaldo. El resto, carcoma y lleno de basura. La trasera del respaldo estaba rota, uno de los brazos también y como puede verse en las fotos, un montón de capas de esparto y tela de saco en un estado lamentable.
Ver el tutorial completo de la renovación del sofá