Cuando menos te lo esperas, se cruzan en tu camino personas maravillosas, de esas que son capaces de alegrarte el día; personas con las que conectas al instante sin saber muy bien por qué. Y eso es lo que me pasó con Mar.
La conocí cuando estuvimos el pasado mes de diciembre en el market del Taller del Abuelo, en El Escorial. Entró con una amiga y se enamoró a primera vista de una mesilla de noche que yo tenía en mi puesto. Una mesilla verde mint con el sobre en madera que hice hace ya algún tiempo. Estuvimos charlando muchísimo rato, mientras ella no dejaba de mirar y acariciar la mesilla. Me encantó conocerla.
La cuestión es que Mar vive en un estudio muy pequeñito en el centro de Madrid, y buscaba precisamente una mesilla de estilo vintage. Quería quedarse con ella, pero había una cosa que le hacía dudar, y es que tenía un sólo cajón. Al tener su vivienda tan pequeña, quería ganar algo de espacio de almacenaje con la mesita de noche.
Se le ocurrió que podía poner debajo una cesta grande para guardar cosas, pero yo recordé que tenía una mesilla de tres cajones muy similar a ésta esperando su turno. Se lo planteé y aceptó encantada; eso sí, tenía que hacerla lo más similar a esta que fuera posible: sobre en madera, color verde mint y con tiradores antiguos como el que tenía esta mesilla.
Siempre que renuevo un mueble lo hago con todo el cariño del mundo, pero con esta mesilla puse aún más si cabe, porque ser para esta persona tan especial.
Como ya viene siendo habitual, olvidé hacer una foto del estado inicial de la mesilla, y cuando me acordé ya había quitado la tapa porque estaba en malísimo estado. Arañazos y golpes hubieran tenido solución, el problema es que no tenía veta, y al lijar para ver qué tipo de madera había debajo, me encontré con que no era nada bonita para dejarla vista.
mesita de noche antes de la renovación
Por otra parte, en el lugar donde habían estado los tiradores, algún salvaje se había llevado parte de la madera para quitarlos... un destrozo, vamos. Con masilla para madera, lija y paciencia, conseguí dejar los cajones saneados. El interior estaba perfecto, eso sí. Tan sólo hubo que reemplazar el costado de uno de ellos.
tapar agujeros de los tiradores con masilla de madera y lijar
Los laterales de la mesilla también tenían algunos arañazos que cubrí con masilla de madera y después lijé bien para sanear.
cubrir arañazos con masilla de madera y lijar
En primer lugar pinté con chalk paint toda la estructura externa de la mesilla. Dos manos con lija de grano fino entre ellas, y lijado más enérgico con lija de grano medio al finalizar, insistiendo en esquinas y zonas de roce.
pintar estructura de la mesilla con chalk paint
Unos fieltros adhesivos en la base de las patas siempre vienen bien para evitar posibles roces en el suelo.
colocar fieltros adhesivos en la base de las patas
A continuación pinté los cajones, siguiendo los mismos pasos.
pintar cajones con chalk paint y decapar con lija de grano medio
decapar esquinas y zonas de roce con lija de grano medio
Para hacer el sobre compré un tablero en madera natural y pedí que lo cortaran a la medida exacta. Después lo teñí con nogalina, y le envié la muestra a Mar para que me diera su conformidad sobre el tono.
teñir tablero de madera natural para el sobre de la mesilla
Una vez teñido lo fijé a la mesilla con espigas y cola de carpintero, dejándolo secar sujeto con sargentos toda la noche. Después lo nutrí y suavicé bien con cera incolora, dejándola absorber por la madera, puliendo con un paño de algodón y repitiendo de nuevo el proceso. Por último, volví a pulir con estopa para que quedara aún más suave.
colocar el sobre de la mesilla con espigas y cola de carpintero
Para terminar, tres manos de barniz mate incoloro para proteger bien la mesilla.
proteger la mesilla con varias manos de barniz mate incoloro
Detalle de los tiradores estilo antiguo, tal y como los quería Mar.
atornillar tiradores
mesilla restaurada estilo vintage
Mar vino a recogerla con su madre, otra mujer encantadora. Les gustó muchísimo a las dos, y Mar tuvo el enorme detalle de enviarme unas fotos de la mesilla en su nuevo domicilio. No las voy a poner por respeto a su intimidad, pero me hizo una ilusión enorme.
Espero que paséis un estupendo fin de semana. Gracias por estar ahí, por vuestras visitas y comentarios que siempre recibo y agradezco con tanto cariño.
Nos vemos en una nueva edición del Finde Frugal de Marcela para seguir compartiendo inspiración e ideas.