El lugar donde lo sitúes una vez restaurado ya es cosa tuya, aunque luce mucho a los pies de una cama de matrimonio, en el salón como mesita auxiliar, o en el recibidor. Además de decorar tu casa, estarás ganando un espacio donde guardar un sinfín de objetos para los que no encontrabas lugar.
?Qué necesitas?
Antes de empezar a trabajar, asegúrate de que tienes todas las herramientas y materiales necesarios a tu disposición.En primer lugar, consigue hojas de periódicos viejos, guantes de goma, gafas protectoras, mascarilla, algodón, trapos de algodón y un rollo de plástico industrial. Las herramientas que no te pueden faltar son las siguientes:
* Destornillador.
* Pinceles.
* Brochas.
* Cepillo de púas metálicas.
* Espátula.
* Papel de lija.
Es importante realizar una inspección visual de nuestro baúl para poder determinar qué materiales necesitaremos. Detectar la existencia de carcoma es una de las tareas principales que debemos de completar, ya que en caso de que el mueble esté afectado necesitaremos un tratamiento químico específico para acabar con esta plaga. Además, serán necesarios otros productos:
* Decapante.
* Alcohol.
* Tinte al agua.
* Tapaporos.
* Cera.
* Barniz.
Ahora que ya lo tienes todo listo, es el momento de comenzar.
Paso a paso
Una vez lo tengas todo dispuesto, protege tu cuerpo y el lugar de trabajo. Si tienes la posibilidad de situarte en un espacio al aire libre, mucho mejor. De esta forma, los fuertes olores de los productos no se condensarán dentro de tu hogar. Aún así, utiliza una mascarilla y gafas para evitar accidentes. Ponte guantes ya que el contacto de la piel con los preparados puede ocasionar lesiones. Reparte hojas de periódico o plástico por el suelo y los muebles cercanos para no mancharlos y no tener que limpiar más de la cuenta.Limpia el interior del baúl: saca todos los objetos que pudiese guardar y elimina, si lo tuviera, el papel o la tela que visten el mueble por dentro. Para eliminar los restos de material que queden, utiliza el papel de lija, y espátula. Debes quitar, también, todas las partes metálicas que contenga: asas, tiradores, cerraduras... Ten cuidado de no dañar la madera. Limpia las piezas con vinagre caliente y estropajo. A continuación, sécalos. Frota los herrajes con un paño suave y aplica barniz antioxidante para metales.
Si has encontrado restos de carcoma en el baúl, lo primero será eliminar este insecto y sus huevos. Para ello utilizaremos un producto anticarcoma tanto en el interior como en el exterior del mueble. En primer lugar, rellenaremos los agujeros utilizando una jeringa, para después aplicarlo de forma abundante utilizando un pincel o brocha. A continuación, envolveremos la pieza con el plástico industrial y dejaremos reposar el tiempo que indique el envase: entre una y tres semanas, aproximadamente.
El siguiente paso es eliminar las capas antiguas de barniz, cera, goma laca... que pueda tener el baúl. Utilizaremos una brocha para extender el decapante, que habremos preparado según las instrucciones del fabricante, a lo largo del mueble. Antes de que se seque por completo, cogeremos la espátula o el cepillo de púas para retirarlo. Es bueno dar una segunda mano de producto, retirándola en esta ocasión con un estropajo. Para terminar, limpiaremos la superficie con una bayeta y alcohol.
Aplica una mano de tinte al agua para igualar el color de la madera. Una vez seco, pule la superficie con el papel lija, de forma que elimines posibles irregularidades en el material. Aplica dos manos de tapaporos con la ayuda de un paño. Y, una vez seco, cubre el baúl con cera. Déjalo secar durante varias horas.
Interior, ?empapelado o forrado en tela?
Puedes optar por volver a forrar el mueble con papel pintado o con tejidos. En ambos casos es recomendable hacerse con un muestrario para elegir el modelo que más se adapta a nuestros gustos. Para esta tarea necesitarás:- Cinta métrica.
- Lápiz blando o tiza.
- Listón de madera. - Esponja.
- Paletina.
- Espátula. - Papel de lija.
- Cúter.
Grapadora de tapicero.
- Espuma o fieltro para forrar.
- Cola.
Limpia y quita el polvo del interior. Mide el frontal, los laterales y el fondo para saber cuánta tela y espuma necesitarás. Coge un tablero de chapa con las medidas del fondo al cual le restamos 1 cm., encola la espuma encima, grapa la tela por un lateral y siempre por la parte de abajo, tensa la tela, ajústala y grapa al mismo tiempo.
Ahora, coloca la espuma en los laterales y sujétala con un poco de cola en el centro y en los ángulos. Mide y corta la tela dejando unos centímetros de más. Ve colocando la tela en los laterales: para grapar empieza echando la tela del revés hacia afuera del baúl; grapada la parte de arriba, vuelve a meter la tela hacia dentro, realiza unos dobladillos en los laterales, tensa y clava la tela en el fondo. Una vez tapizados los lados, coloca la tapa tapizada en el fondo.
El último paso será barnizar el mueble y volver a colocar todos los herrajes una vez el baúl esté completamente seco. De nuevo, ten cuidado al llevar a cabo está tarea para no arruinar todo el trabajo. Ahora que ya tienes tu baúl listo, busca un sitio donde luzca con el esplendor de antaño y disfruta de un trabajo realizado por ti mismo.