La idea que escojamos para la pared de cualquier habitación de la casa va a ser un referente a la hora de elegir el resto de la decoración. Una elección discreta nos da mucha más libertad a la hora de escoger los muebles, pero hoy en día es muy recurrida la combinación de paredes llamativas con un mobiliario sencillo.
Así, como esta semana la vamos a dedicar al especial salones, desde aquí os proponemos recurrir a la originalidad para decorar una o varias paredes de este espacio de la casa, cuya amplitud nos proporciona muchísimas posibilidades en cuanto a opciones decorativas se refiere. Por ello, vamos a hacer un repaso de algunas de las ideas que hemos ido anotando.
Decoración con mosaico
En East Coast Creative descubrimos una opción perfecta para entornos más modernos y contemporáneos, que podemos adaptar a cualquier gama de colores. Con cinta de carrocero y un poco de paciencia iremos delimitando las líneas que darán como resultado nuestro mosaico.Como veis, el resultado es muy vistoso y podemos emplearlo, por ejemplo, para decorar la pared donde colocaremos el sofá, o el rincón que sirve de comedor. Así, en este blog os explicamos el paso a paso para llevarlo a la práctica.
Rodillos con texturas
Si quieren algo un poco diferente, como un estampado, los rodillos con texturas son una grandiosa opción para conseguir un trabajo uniforme en menos tiempo. Eso sí, es mejor practicar un poco antes de decidir pintar nuestras paredes, pues una vez pasado el rodillo no podremos volver atrás para repasar, por lo que necesitamos un resultado eficaz a la primera.
Foto: The Painted House
Así, hay algunas claves básicas que cumplir a la hora de pintar con estos rodillos: emplear sobre paredes lisas, pintar de izquierda a derecha y en vertical.. De todas ellas os hablamos mejor en este blog.
Empleamos plantillas
Otra opción para plasmar dibujos en las paredes es empleando plantillas que, además, podemos elaborar nosotros mismos en cartones. Necesitaremos un poco de paciencia y mucha implicación a la hora de llevar a cabo este trabajo, si queremos obtener un resultado uniforme.
Para ello necesitaremos, básicamente, dos tonalidades de colores, un lápiz para marcar el dibujo y un pincel para rellenar las marcas. En este blog tenéis explicado, paso a paso, el proceso que siguieron en el blog Nannygoat para conseguir el efecto que veis en la imagen.
Pintar un mural
La última propuesta que tenemos es dejar una pared en blanco, sin decoración, para pintar en ella un precioso mural. Podéis encargar que os lo hagan o, si queréis ahorraros el elevado coste que ello supone y, además, os consideráis lo suficientemente manitas para ello, podéis hacerlo vosotros mismos.Para ello, por ejemplo, podéis ayudaros de un proyector, con el que podéis proyectar la imagen sobre la pared y emplearla como guía para marcar las líneas del dibujo o forma, para después poder pintarla con pinceles y pinturas acrílicas. Además, en este blog vimos también la posibilidad de elaborar un proyector casero.
Foto: This Achitecture
¿Qué les parecen estas ideas? ¿Han puesto alguna en práctica?
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