En esta ocasión he utilizado dos frentes de unos cajones rescatados de la calle para hacer una pareja de cuadros de estilo vintage utilizando dos motivos diferentes de la misma servilleta. Ahora mismo estoy recordando que ya hice otro cuadro con ella, pero utilizándola entera, que podeis volver a ver aquí . Está claro que esta servilleta es de mis preferidas.
Estos son los frentes tal y como los quité de sus cajones... bueno, bastante más limpitos.
Antes de nada, había que hacer desaparecer los agujeros donde habían estado los tiradores. Para ello, los rellené con pasta de madera.
Una vez seca la lijé bien, igualando la superficie y... como si nunca hubieran estado allí!
Los pinté con un par de manos ligeras de chalk paint Xylazel color blanco antiguo. Después de un buen lijado, más concienzudo en esquinas y molduras, así es como quedaron. Me parecíeron tan bonitos así desgastados, que me daba hasta pena hacerles nada más.
Esta es la servilleta de la que os hablaba antes. Rasgué con los dedos los dos motivos principales y los apliqué a la superficie central de los frentes con cola diluida en agua.
Con mucho cuidado, fui adaptando el resto del papel al escalonado de la madera.
En el segundo, como el motivo era más pequeño, añadí otros dos que habían quedado en la servi para que los dos cuadros quedasen más parejos. Por último, puse la frase de la servilleta, Marché aux Fleurs, dividida entre ambos para darles más sensación visual de continuidad.
Como acabado, dos o tres manos de barniz ultramate incoloro hasta integrar perfectamente el papel entre las molduras. Os enseño el decoupage un poquito más en detalle.
Ya lo sabeis, la próxima vez que veáis unos cajones o un mueble abandonado que no os decidais a rescatar, al menos haceros con los frentes. Seguro que les sacáis buen provecho!
Voy a compartir los míos en el Finde Frugal de Marcela, y a llenarme de paso de inspiración para futuros trabajos.
Feliz fin de semana!!!