Decorando una terraza amplia o un porche
Para este espacio podemos escoger un juego de sillones y mesa de centro de ratán o mimbre en blanco, acompañado con textiles que creen armonía y aporten calidez al espacio. En concreto, en este caso se ha combinado una alfombra de exterior en crudo, con cojines en tonos cálidos.
Por su parte, en la decoración se aprecia un claro protagonismo de lo natural, a través de plantas y flores expuestas en una mesa de jardinería, un jardín vertical, jarrones decorativos como centro de mesa...
Decorando un jardín amplio
Si disponemos de un espacio de grandes dimensiones, lo mejor es recurrir a los ambientes separados, tal y como vemos en la imagen. Por un lado observamos una zona de comedor, dedicada a celebrar comidas, cenas... y conseguida a partir de un juego de mesa y sillas de ratán sintético y aluminio.
Por otro lado, tenemos un segundo ambiente, acondicionado con un juego de sillones y mesa de centro a juego con el espacio de comedor. Y, una vez más, los textiles ayudan a crear un bonito ambiente decorativo, a partir de una alfombra de exterior y cojines de estampados geométricos.
Decorando una pequeña terraza
Lo más común en las viviendas es tener una terraza con espacio limitado que, por lo general, suele ser más larga que ancha, por lo que está decoración nos parece perfecta. Sin duda, el revestimiento de las paredes y el suelo de madera adquiere un gran protagonismo, pero se combina perfectamente con un pequeño y encantador rincón de lectura, conseguido a partir de un banco de madera, unos cómodos cojines y una balda decorada de pequeñas plantas.
Por su parte, podemos crear otro pequeño espacio dedicado, por ejemplo, al desayuno, con un pequeño juego de mesita de café y sillas. Además, gracias a la alfombra podemos crear un ambiente separado. Por último, la iluminación mediante guirnaldas permite aportar un toque íntimo y muy especial.
Otros rincones con encanto
Si tenemos la suerte de contar con espacio extra en el jardín o la terraza, las posibilidades se multiplican. ¿Y qué se nos ocurre para ellos? Por ejemplo, un pequeño rincón de cactus y suculentas, una estructura de madera junto a un árbol para horas de lectura, un jardín vertical de madera y alambre, un pequeño huerto de plantas aromáticas o un espacio más amplio dedicado exclusivamente a la jardinería.