Una solución, claro, es lijar o cepillar la puerta, pero en este caso vamos a usar un sistema que evita tener que hacer eso. Nos hemos inspirado en Bricoaprendiz, que sabe mucho de esto y no necesitas tener conocimientos de carpintería
Lo primero que tenemos que hacer es desmontar la puerta. en el vídeo verás un apaño que Bricoaprendiz ha hecho para sacar la puerta, pero si no, pues se quita a pulso o ayudándote de alguna herramienta
Ponemos en las bisagras unas arandelas. Normalmente en las ferreterías las venden si se lo dices así, arandelas para bisagras, pero lo mejor es que la lleves para que sea la medida correcta.
Una vez puestas las arandelas, la puerta dejará de rozar en el suelo.
Ojo, si la puerta ha crecido por humedad es posible que no valga este sistema porque dé también en la parte de arriba. En ese caso no queda más remedio que lijar, si es poco, o cepillar, si es mucho.
Veamos el vídeo de Bricoaprendiz, donde, además, aprenderás un par de apaños que usa