Así, vamos a ver 6 cuestiones clave que debemos tener en cuenta a la hora de elegir el modelo adecuado:
1. El tipo de toldo, que dependerá de si es para terraza o jardín, o para ventana o balcón.
2. Medidas: el largo del toldo lo determina el ancho de la ventana. Además, debemos tener en cuenta el avance, es decir, la profundidad del toldo, que define la sombra a proyectar. Podemos encontrar toldos de hasta 6 metros de largo por 3,5 metros de avance, aunque también podemos hacerlos a medida.
3. El material de la estructura: las de aluminio son más resistentes a las inclemencias meteorológicas, no se oxidan y son más ligeras. Las de acero se emplean en zonas protegidas por un techo o voladizo.
4. Tipo de estructura:
- Sin cofre: tanto el mecanismo como el cierre quedan expuestos.
- Semi cofre: la tela queda protegida cuando se recoge.
- Cofre integral: tanto la tela como la estructura quedan protegidos.
5. Tipo de tejido:
- Poliéster: es la tela más económica, pero también la menos resistente y duradera.
- Acrílica: destaca por la durabilidad de los colores y la resistencia a los desgarros. Además, ofrece una buena protección solar.
- Microperforada: ofrece una mayor protección frente a las altas temperaturas, ya que permite evacuar el aire caliente que se acumula debajo del toldo.
En cualquier caso, deberemos consultar la normativa de la comunidad de vecinos, pues es habitual fijar unos colores o estampados comunes para todos.
6. Otras prestaciones: toldos automatizados, sensor de viento (que recoge el toldo si hace mucho aire) o sensor de viento, lluvia y sol (recoge el toldo si llueve o hace mucho aire y lo despliega si hace sol).
Ahora que tenemos la terraza, el balcón o el porche protegido del sol y el calor, vamos a aprovechar bien el espacio para disfrutar al aire libre de jornadas relajantes, comidas entre amigos, reuniones familiares, tardes de juegos con los niños... Para ello, podemos disponer de conjuntos de muebles de exterior que se adaptan a los diferentes espacios, en función del tamaño, la utilidad...
Y, por supuesto, no debemos olvidarnos del aspecto decorativo, ya que elementos como los textiles (cojines, manteles, caminos de mesa, alfombras de exterior...), las plantas y otros detalles (jarrones, bandejas, velas...) harán que el espacio sea mucho más acogedor.