Este es el caso de estos electrodomésticos, aparatos muy parecidos a microondas pero diseñados para hornear cualquier receta, aunque en menor cantidad de un horno de gas convencional, que pueden llegar a presentar óxido, al estar en contacto con los alimentos a altas temperaturas. Si posees un horno eléctrico de acero inoxidable, o cualquier electrodoméstico de cualquier metal comercial, aprender a limpiarlo correctamente es fundamental para evitar y retirar el óxido que presentan.
Un método casero de cómo quitar el óxido de un horno eléctrico, se puede llevar a cabo con materiales que seguramente todos tenemos en casa, hablamos de la limpieza con limón y sal. Para hacer esto, toma una cantidad suficiente de sal de mesa o sal sin refinar y cubre completamente la superficie oxidada, luego exprime jugo de limón por encima hasta mojar toda la sal. Deja reposar por un rato, retira la mezcla y procede a limpiar con una lija de grano suave o un paño grueso para eliminar los residuos.
Si esto no es suficiente, puedes aumentar la potencia con bicarbonato de sodio, para lo cual debes mezclar este con limón hasta formar una espuma blanca, la cual untas en la superficie oxidada, dejándola actuar antes de retirarla. Si no sabes como quitar óxido de un horno eléctrico de otro tipo de metal, donde la herrumbre está más arraigada, quizá este método no funcione, por lo que tendrás que recurrir a productos químicos especializados para esta tarea.