¿Y por qué debemos ponerle solución al aislamiento? Pues porque nos sorprendería saber la cantidad de efectos negativos que puede tener el exceso de ruido para nuestra salud, empezando por el estrés, los dolores de cabeza, la alteración de sueño, los cambios de humor…
Fuente: Diana.grytsku/Freepik
Cómo mejorar el aislamiento acústico de una vivienda e insonorizar un dormitorio
A menudo ocurre que nos encontramos con viviendas que no se encuentran bien aisladas. El problema es que, una vez construidas, es complicado meternos a modificar la fachada o la estructura, y por ello tenemos que recurrir a otras opciones que tratemos desde dentro de la casa:Aislar desde el suelo. Se trata de poner un nuevo suelo sobre el anterior, para de esta forma poder instalar en medio de ambos una capa aislante.
Aislar las paredes. Es muy común encontrarnos con paredes que dividen dos viviendas que son muy estrechas, no están elaboradas con ladrillos acústicos ni sistemas que limiten el ruido o, incluso, con instalaciones eléctricas que coinciden. De este modo, al igual que en el caso del suelo, se trata de construir un doble tabique, integrando entre ambas paredes un material aislante.
Otra posible alternativa para las paredes que limitaría los ruidos es la instalación de revestimientos. Pueden ser de madera, de porcelánico… aunque hoy en día existen revestimientos especialmente diseñados para el aislamiento acústico.
Aislando el techo. La solución llegaría de la instalación de un falso techo, para poder instalar un aislamiento.
¿Y qué tipo de materiales aislantes existen?
Uno de los más empleados son las láminas de poliuretano, ya que son económicas y funcionan muy bien contra los ruidos. Se encuentran en diferentes densidades y son fáciles de instalar, tanto en paredes como en techos.Otra alternativa la lana de roca, que también presenta una buena capacidad para aislar del frío (tiene una conductividad térmica muy baja) y evitar las humedades. Está elaborado a partir de rocas volcánicas, por lo que tiene muy buen comportamiento frente al fuego. Por todo ello se utiliza para rellenar cámaras de aire en falsos techos, paredes de fachadas…
Por otro lado nos encontramos con una opción económica y más natural, el corcho, que podemos encontrar en forma de losetas, de rollos, en láminas… y que se utilizan tanto en suelos como paredes. Por ejemplo, en una pared podríamos instalar paneles de corcho negro (para lo que se utiliza un pegamento especialmente indicado), y sobre ellos una nueva pared de pladur.
Si lo que queremos es insonorizar una habitación para convertirla, por ejemplo, en un estudio de música, se suelen emplear espumas acústicas, ya sean corrugadas, piramidales, o de materiales como la melanina o el poliuretano, que se pegan directamente en las paredes y el techo.
Aislamiento desde las ventanas
Uno de los puntos clave a la hora de hablar de aislamiento, tanto térmico como acústico, son las ventanas. Por ese motivo recomendamos contar con modelos de calidad, elaborados en perfiles de PVC (el material que ofrece mayor aislamiento), doble acristalamiento (con un espesor de al menos 6 mm y cámara de aire), apertura estanca (mejor sistemas abatibles u oscilobatientes)… No dudéis en echar un vistazo a los modelos de Kommerling, donde encontraréis modelos que reúnen todas las cualidades óptimas.Otros consejos para reducir ruidos
Además de las medidas anteriormente mencionadas, podemos recurrir también a algunos elementos de la decoración para reducir el impacto de los ruidos. Por ejemplo, las cortinas opacas o las alfombras ayudarán a absorber los ruidos. De hecho, también existen cortinas elaboradas con PVC o fibra de vidrio, especialmente indicadas para limitar los ruidos.Por su parte, otra medida rápida y sencilla es instalar burletes en las puertas.
Esperemos que os haya resultado de utilidad este post. Nos vemos en el próximo artículo de Vivienda Saludable.
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