Nuestra amiga DLula es una gran aficionada al reciclaje, y continuamente guarda toda clase de chismes para darles inspirado uso en cualquier momento. Así lo ha hecho con los cajones de un viejo escritorio desaparecido; con dos de ellos hizo pequeños baúles, y el tercero, de menos fondo, lo ha convertido en una preciosa bandeja vintage.
Señala nuestra amiga la buena calidad de la madera, algo habitual en los escritorios, muebles muy lujosos de las casas antiguas. ¡Realmente era una pena no aprovechar esos cajones, y no podemos imaginar una forma de sacarles partido que supere a la de nuestra amiga, con ese reciclaje lleno de inspiración y buen hacer!
Por aquí podemos observar algunos de los cajones del antiguo escritorio. El utilizado por DLula para este reciclaje fue el de arriba. La primera labor fue quitar a golpe de serrucho los tiradores, que estaban clavados y encolados.
"Y con esa materia prima, mis ganas, un montón de láminas, pinceles, tijeras, cola, sellos, tinta y silencio empezamos la aventura", cuenta nuestra amiga.
Luego de haberle pasado una vela por los bordes, nuestra amiga procedió a pintar el cajón de color blanco "Bendito blanco que todo lo dignifica", señala DLula con entusiasmo. Nuestra amiga añadió un listón en el lado libre, algo que los cajones no necesitan pero las bandejas sí.
Después de colocar sendos tiradores por ambos lados, tocaba lijar aquí y allá, para que empezara a parecer usada.
"Esta lámina es una de mis preferidas, pensé que era perfecta para hacer un vestidito nuevo", explica DLula.
Y, dado que la bandeja será la reina de algún rincón, nuestra amiga le pinta una bonita corona.
La artista siguió añadiendo otros adornos que la hicieran única: números, motivos con stencils, y rosas en decoupage.
Y este es el admirable resultado, una preciosa y refinada bandeja vintage. "¡En reciclaje, segundas vidas siempre fueron buenas!", afirma nuestra amiga DLula.
¿que les ha parecido? ¿Les gustaría que le regalaran algo parecido?