Las casas puedes cumplir una importante función en el cuidado del medio ambiente. Hay personas que piensan que esto no es así, y están equivocados ya que, si todas las personas que posean un hogar hicieran una pequeña aportación, se pudieran obtener grandes resultados. Es importante mencionar, que una gran parte de la población creen que los únicos culpables son las grandes compañías, ya que estas es ocasiones son grandes productoras de gases de invernadero.
Vamos a examinar en detalle tres maneras de proteger el medio ambiente, sencillas, eficaces, y que además nos aportan un bienvenido ahorro en la economía doméstica: aprovechar el agua de lluvia, instalar una compostadora, y reciclar toda clase de embalajes, materiales y electrodomésticos desechados.
Aprovechar el agua de lluvia
¡Sólo necesitaremos un canalón y un barril para almacenar toda la lluvia caída en el tejado! Su primera utilidad obviamente es regar el jardín, necesidad que genera una parte considerable del consumo anual. También utilizaremos este servicial depósito para limpiar el coche, baldear el suelo y otras muchas labores. El recipiente de plástico se adapta con las herramientas normales de bricolaje.
Puedes ver el montaje detallado en este vídeo. Los barriles ya se compran habitualmente en viveros y también en suministros de jardín. El canalón de PVC para conducir el agua del tejado al depósito se compra en almacenes de fontanería y se instala también sin dificultad. Otra utilidad del agua de lluvia es alimentar un circuito secundario, para la lavadora, el lavavajillas y las cisternas de los WC.
Una compostadora en el jardín
¡Otra manera fenomenal de ahorrar beneficiando al medio ambiente! El fertilizante hecho con residuos orgánicos es el mejor abono que existe, y si todas las casas de una urbanización ponen su compostadora, en un año las familias conseguirán evitar muchos trayectos de camión de basura, y por tanto muchas emanaciones de CO2.
En este vídeo aprenderemos la manera sencilla de fabricar una compostadora con palets. Y otra opción de moda es utilizar los prácticos barriles, montando una compostadora que podremos hacer girar, lo que acelera la fermentación de los residuos. No te pierdas este magnífico ejemplo, con materiales comprados en una chatarrería.
¡Reciclando que es gerundio!
Otra eficaz medida ecológica es reutilizar toda clase de objetos en lugar de arrojarlos al contenedor. ¡Y no sólo muebles! Nuestra amiga Ericadeco transformó una vieja aspiradora en banqueta revistero; y, a la inversa, podemos conseguir un electrodoméstico a partir de un artilugio desechado, por ejemplo la incubadora que hizo nuestro amigo Lozi31 con una nevera de playa.
Además de estos residuos, podemos reciclar embalajes, cartones, palets, tablas de encofrado, muebles viejos y otros muchos objetos: una pila de materiales que no engrosarán los vertederos y no arderán desprendiendo CO2. Hay tantos objetos aptos para el reciclaje en una vivienda, que parece razonable destinarles un lugar propio de almacenamiento. ¡Pronto hablaremos de ello!
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