¿A quién le viene mal un masaje? Las prisas y el estrés diario hace que nos olvidemos de lo que de verdad importa: nosotros mismos. Regalarte un masaje no debería ser algo extraordinario. Incorporarlo a nuestra rutina de hábitos saludables hará que en poco tiempo notemos sus beneficios.
Hace unos días estuve en L’Alkimia Spa Holístico disfrutando de una experiencia que me hizo reflexionar sobre lo importante que es echarle freno al estrés. No solo supuso un alivio físico, sino que además me proporcionó un estado de calma interior que hacía tiempo que echaba en falta.
¡Para y escúchate!
Una gotera, un radiador que no funciona, un mueble que necesita una restauración… normalmente no dudamos en buscar una solución para los diferentes problemas que surgen en nuestra vivienda. Sin embargo, es bastante habitual que dejemos de lado las tareas de mantenimiento del hogar en el que más tiempo vamos a vivir: nuestro cuerpo.
Y es que al igual que los aparatos y objetos que nos rodean, el cuerpo y la mente también necesitan un mantenimiento. Emite señales para que nos cuidemos un poco más, pero en muchas ocasiones solo hacemos caso cuando la reparación es urgente.
Recientemente he podido experimentarlo. Soy una persona nerviosa y siempre ando corriendo de aquí para allá. Hacía meses que mi mente me decía “¡para!”. Sin embargo, lo he ido posponiendo hasta que mi cuerpo ha hecho “crack”: bajada de defensas y una infección bastante molesta.
Sentirnos nerviosos, tener estrés emocional, ansiedad o insomnio, son solo algunas de las señales con las que nuestro cuerpo nos comunica que algo no va bien. Desoírlas conlleva al colapso físico, a un “si tú no paras, ya me paro yo“.
Un masaje a la semana es suficiente para eliminar todas estas señales, equilibrando la salud holística y potenciando nuestro bienestar.
Beneficios de los masajes
El masaje probablemente fue la primera “medicina” que utilizó el ser humano para aliviar el dolor. De hecho, se han encontrado evidencias arqueológicas de la existencia del masaje en antiguas civilizaciones como la griega, china, egipcia o en Mesopotamia, por poner algunos ejemplos.
Todos los diferentes tipos de masaje comparten un objetivo común: el bienestar físico y mental. Gracias al masaje se consigue relajar el músculo, los nervios y desbloquear puntos energéticos, aportando múltiples beneficios:
Son un apoyo para vencer la ansiedad y la depresión gracias a que ayudan a controlar los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Además, estimulan la serotonina y dopamina, dos neurotransmisores relacionados con la depresión.
Al reducir el estrés, mejora nuestro sistema inmune y endocrino.
Alivia dolores crónicos musculares, dolores de cabeza y migrañas, problemas de hipertensión, etc. Incluso contribuye a aminorar los efectos de los tratamientos de enfermedades como el cáncer.
En las mujeres disminuye los dolores menstruales y las molestias del síndrome premenstrual.
Mejoran el sueño debido a que aumenta las ondas delta del cerebro. El sueño tras un masaje es mucho más reparador y profundo, proporcionando una mayor calidad de descanso.
Los masajes te hacen sentir resplandeciente debido a que limpian la piel y aumentan el flujo sanguíneo. Además ayudan a que tu energía vital fluya, y eso se nota en la cara.
Recibir masajes también ayuda a aumentar la velocidad y la agilidad mental.
3 razones para regalarte un masaje en l’Alkimia
Existen tres razones por las que l’Alkimia Spa Holístico es uno de los mejores centros que he visitado: su amplia oferta de servicios (no solo masajes), su profesionalidad y el trato personalizado.
Elige qué masaje vas a regalarte
Su amplia y variada carta de masajes lo pone muy difícil a la hora de elegir. La lista es muy extensa y estas son solo algunas de sus especialidades:
Tradicional Tailandés
Con piedras volcánicas
Con pindas
Reflexología Podal
Shiatsu Zen
Circulatorio de piernas
Craneo-facial
Japonés Amma
Masaje de oro (con aceite esencial de oro)
Antiestrés (personalizado)
Masaje Holístico (adaptado a tus necesidades. Este masaje es del Departamento terapéutico)
También ofrecen circuitos de SPA, peeling corporal y tratamientos especiales para la fibromialgia y la soriasis.
Personalmente he probado la reflexología podal, el masaje tailandés y el cráneo-facial. Los tres me encantaron, si bien he de reconocer que siento debilidad por los masajes en los pies. Además, esta semana voy a asistir a uno de sus talleres para iniciarme en el método hipopresivo.
Manos maravillosas
Que el masaje es un arte es algo que saben muy bien en l’Alkimia Spa Holístico. Su experiencia de más de 20 años unida a un equipo de profesionales especializados, garantiza un resultado satisfactorio.
Tras un masaje te hacen sentir que tienen “magia en sus manos“. No solo son capaces de aliviar la tensión física, sino también te ayudan a alcanzar ese estado de relax que necesitas.
De verdad les importas
Todas las profesionales que me trataron me transmitieron que les importaba mi bienestar, dejando lo mejor de ellas para proporcionármelo. Sentí una preocupación cercana y natural que no me hizo sentir como un cliente más.
Por esta razón, mi experiencia no solo supuso una mejora a nivel físico y mental. Me resulta difícil explicarlo pero, el hecho de sentir que una tercera persona se preocupaba más por las señales que emite mi cuerpo que yo misma, me hizo reflexionar sobre uno de mis propósitos del 2017: cuidarme más. ¿Realmente lo estaba haciendo?
En definitiva, no olvides cuidar y mantener el único hogar en el que vas a vivir toda tu vida .Regalarte un masaje en un centro especializado como l’Alkimia Spa Holístico, te ayudará a reparar goteras y apretar algún que otro tornillo que a veces se nos afloja
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