En el post de hoy, os enseño el paso a paso y algunos trucos para colocar un suelo de vinilo adhesivo de planchas… ¡Ya verás qué fácil es!
Hace ya tiempo que cada vez que entro a la ‘despensa-trastero’ hiperventilo. Es una habitación que cuando llegamos a la casa estaba en bruto con el material de obra, sin techo, ni suelo, ni paredes, y como ya teníamos un montón de frentes abiertos, se ha quedado así. Pero ahora ya me he decidido y para hacer un cambio rápido me he decidido por empezar por colocar un suelo de vinilo adhesivo. ¡Os enseño el antes y el después y luego te cuento el paso a paso y mis truquitos por si te animas a colocar uno en tu casa!
Además de ser un cambio rápido que puedes hacer tú mismo, los suelos de vinilo tienen un montón de ventajas: son más cálidos que los suelos cerámicos, pero son resistentes al agua, por lo que pueden usarse también en cocinas o baños, y tienen una gran resistencia. Además, los hay como el que he escogido que imitan a la madera, con acabado similar a las baldosas, con estampados, lisos…. y están muy conseguidos, la verdad.
Hay suelos de vinilo en grandes rollos, con lo que puedes colocarlos en superficies teniendo muy pocas juntas, pero me parece más complicado dejarlos perfectos, así que he optado por las lamas.
Básicamente hay dos sistemas para colocar un suelo de vinilo de lamas: los suelos en click, en los que las lamas encajan unas en otras y se colocan con pegamento, y los de vinilo adhesivo, que ya tienen incorporado el producto que hace que se fijen al suelo. Estos últimos son los que he escogido y de los que os cuento aquí el proceso de colocarlo. ¡Allá van los pasos!
Paso 1: limpiar bien la superficie
Lo primero que hay que hacer para colocar un suelo de vinilo es dejar la superficie impoluta, porque cualquier suciedad puede provocar que no se fijen bien las lamas adhesivas y se levanten. Así, hay que limpiar a conciencia: aspirar bien el polvo y fregar.
En caso de no tener un suelo regular, es recomendable igualarlo previamente, porque las irregularidades tampoco se llevan bien con las lamas de vinilo adhesivo.
Paso 2: empezar desde la mitad del suelo
Una vez decidido el sentido en el que vas a colocarlas, es importante comenzar desde el centro de la habitación hacia los laterales. Una vez marcado el centro, colocamos la primera lama y con una escuadra nos ayudamos para que quede perfectamente recta. Verás que en la parte trasera de la lama el papel tiene unas flechas, que te indican la dirección correcta de colocación para que quede correcto el dibujo.
Paso 3: colocar las siguientes líneas
A continuación y siempre con la escuadra, vamos colocando el resto de la línea central, y de ahí vamos hacia los lados. Para hacer el efecto de un suelo de madera, colocamos la línea de al lado desde la mitad de la primera, como en la imagen. Es interesante presentarlas antes de fijarlas, de manera que veamos cómo quedaría y cuántas lamas tendremos que adaptar en cada línea.
Paso 4 Marcar los cortes de las lamas
Como vemos, hay que cortar por la mitad las lamas de al lado de la principal. Lo primero que hacemos, es medir la mitad de la lama, y marcarlo con un lápiz.
Paso 5 -Cortar las lamas con un cutter
Ya tenemos la medida, ahora hay que cortarla. ¿Cómo? Con un simple cutter y una tabla debajo. Pasamos el cutter por la línea de lápiz que hemos hecho.
Mi truco: No hace falta que el corte llegue hasta el otro lado, porque una vez marcado con el cutter, doblamos la lama por el corte que hemos hecho y se parte cual onza de chocolatina. Os muestro un pequeño vídeo del corte, para que veais que facilón. A veces hay que doblarlo en ambos sentidos, pero si el corte es recto, es super sencillo.
Paso 6 Un truco para hacer una plantilla en las lamas de suelo de vinilo irregulares
Es probable que no solo tengas que hacer cortes rectos y en la mitad, sino que para rematar en el lado contrario necesitarás cortar las lamas a medida, o sortear un tubo o un inodoro. Como el corte se realiza desde la parte trasera de la lama, os paso mi truquito para crear estas lamas a medida. Lo primero, cojo el papel que viene como recubrimiento del adhesivo de alguna lama ya colocada como plantilla, así ya tengo el tamaño de ancho. Por la parte donde vienen las flechas, marco con el lápiz la medida que necesitamos.
Después cortamos el sobrante de la plantilla, y la colocamos AL REVÉS sobre la parte trasera de la lama. ¿Por qué pongo al revés en mayúsculas? Porque ten en cuenta que hemos cogido la medida como si tuviéramos la lama con el dibujo para arriba, pero para marcar y cortar lo hacemos por debajo. De ahí que es vital que la plantilla esté dada la vuelta al marcarla en el dorso de nuestro suelo de vinilo. Os muestro en la foto este otro caso, donde teníamos que adaptarnos a una columna redonda. Como ves, la plantilla se coloca al revés, con las flechas para abajo.
Como en el resto de casos, marcamos con el lápiz y cortamos el trozo que nos sobre.
Después, lo colocamos en el lugar donde debería ir aún con el papel por si hay que rectificar, y si todo encaja… ¡Una lama irregular menos! jejeje
Paso 7: paciencia y a terminar el suelo de vinilo
Ya sabes todos lo trucos y cómo colocarlo, ahora solo tienes que terminar de cubrir el suelo. Es laborioso, pero no difícil, así que no hay más que armarse de paciencia y seguir con la tarea hasta acabar. Como véis, mi suelo de vinilo es similar al que tengo en el salón de baldosa.
Paso 8: recolocar todo… ¡y a disfrutar de tu suelo de vinilo!
Una vez acabado, podemos devolver todo a su lugar…. Yo ya he aprovechado a cambiar las estanterías por unas de madera, que quedan mucho más ‘apañás’.
¿Qué te parece? ¿Te gusta el cambio que he hecho en este trastero en un par de tardes con un suelo de vinilo adhesivo? Ahora estoy dándole vueltas a si me creo un pequeño zócalo con las lamas sobrantes… ¿Qué opinas?
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