En muchas ocasiones podemos sacarle partido a todos estos muebles. Hoy, en concreto, os quiero proponer la manera para restaurar un cambiador de bebé, un mueble muy básico al que podemos darle la vuelta totalmente.
En primer lugar, este cambiador en concreto tiene la gran ventaja de que es un armario/cambiador, es decir, una vez que el bebé no necesita utilizar el mueble para cambiarse, simplemente retirando la balda superior se puede convertir en un práctico armario o estantería para sus primeros años de vida.
Para continuar con la tarea de restaurar un cambiador de bebé hay que retirar la parte superior del mueble y sacar la balda dónde se cambiaba el bebé. Con ese paso, simplemente, ya podemos utilizar el mueble como aparador. Sin embargo, para que nuestro tuneo quede más original, podemos hacer que, además, nuestro nuevo aparador vaya acorde con nuestro salón. Para ello, lijamos bien el cambiador, con una lija de grano fino para no estropearlo y lo pintamos del color que más nos guste. Además, ahora que está tan de moda podemos pegar papel pintado en el fondo del mueble, para que nos quede más bonito. Por último, barnizamos, para que el mueble brille y quede como nuevo.
¿Qué os parece? Como podéis ver, es muy sencillo, nada más que quitando una parte del mueble y dándo una manita de pintura podemos tunear este cambiador, transformándolo completamente. No tendremos que tirar el mueble ya fácilmente le hemos dado una nueva utilidad. ¿Os animáis?
Fuente: Ikea