Realizar una pared de ladrillos tu mismo, es un trabajo de albañilería que, además de serte útil para delimitar un terreno o decorar un jardín, te servirá de aprendizaje antes de acometer obras mayores. Se trata de un trabajo sencillo y rápido.
Necesitarás un mortero y arena, losas de hormigón y ladrillos. En cuanto a las herramientas, te serán imprescindibles una pala y un cordel, nivel y plomada y, por último, una paleta.
En este tipo de construcciones bastará con que el tabique tenga el espesor de un ladrillo, pero no menos, pues con uno de medio ladrillo las posibilidades de trabajar se verán muy limitadas. En cualquier caso, debes tener en cuenta que, el grosor debe estar en función del tamaño de la obra (altura y superficie).
Los muros altos y largos hay que reforzarlos con contrafuertes, es decir, zonas en donde el grosor aumenta en 2 ó 3 ladrillos. También es importante que los remates para que su efecto final sea decorativo y resista la lluvia y las bajas temperaturas.
Los cimientos no presentan ninguna diferencia notable con los usados en otros trabajos de albañilería. Para los de dimensiones normales basta con cavar una zanja de 50 cm. de profundidad. Rellene aproximadamente la mitad de arena y asiéntela con un rodillo o un pisón hasta que quede dura.
Comienza el muro con dos pisos de ladrillos que formen una base ancha, y encima pon otros dos un poco más estrechos. A partir de ahí construye el tabique. Coloca un cordel tenso atado a dos estacas clavadas en ambos extremos del muro; te servirá para trabajar recto.
Coloca los ladrillos uno a uno, y con una plomada, verifica de vez en cuando la alineación de las juntas que proporcionarán un aspecto regular al muro. Tanto para los cimientos como para los remates, tendrá que usar mortero rico en cemento, pues son las partes más expuestas a la humedad y necesitan una mayor resistencia.
En los muros pesados o de más de un ladrillo de grosor, no hay que poner las piezas directamente sobre la arena; instala sobre ellas losas de hormigón. Sobre esta base será suficiente con disponer un solo piso de ladrillos, colocados transversalmente, antes de iniciar la construcción del muro propiamente dicho.
Agradecimientos: Fotografías de Dicebourbon/Flickr y Red Moon Snactuary/Flickr