Pues, en realidad, eran una pareja de lámparas las que teníamos. Pero decidimos "divorciarlas" dándoles un acabado diferente.
Aunque el proceso de transformación lleva los mismos pasos, os los mostramos para que los tengáis a mano:
2º lijamos para darle una capa de imprimación
y que la pintura quede mejor adherida después 1º separamos el pie de bronce de su pantalla
4º recuperamos la pantalla original,
ayudándonos de un cúter, para después lijar
bien la estructura metálica 3º pintamos la lámpara de color azul y,
una vez seca, le dimos una capa de barniz
incoloro mate para protegerla
6º cortamos la silueta de nuestro patrón con
unas tijeras
5º fabricamos un patrón con un papel, lápiz
y el esqueleto de la pantalla 7º cortamos la tela seleccionada y la
pegamos a la estructura metálica de la pantalla
con ayuda de pegamento especial para textil
Y el resultado obtenido para esta otra lámpara ha sido el siguiente:
¡Como siempre, esperamos que os haya gustado e inspirado!
¡Un abrazo y feliz semana!