Hay diferentesformas por las que la radiación solar puede llegar al hogar:
- Por radiación directa, es decir, los rayos solares inciden directamente en la vivienda.
- Por radiación difusa, que se recibe de la atmósfera por la propagación de la radiación solar sobre ella.
- Por radiación de albedo, que es la que se refleja en la superficie terrestre.
Así, todas ellas pueden afectar a la vivienda en lo que se conoce como la envolvente térmica, es decir, las fachadas, cubiertas, ventanas... Aunque también puede llegar al interior de la vivienda por conducción.
¿Cuáles son las posibles consecuencias?
En primer lugar podemos hablar de los productos inflamables que, ante la incidencia del calor, pueden llegar a ser explosivos. Del mismo modo,productos como la gasolina o los solventes ligeros pueden desprender gases por culpa del calor. Por esa razón, es importante que en casa siempre tengamos los productos inflamables (insecticidas,disolventes...) a resguardo y lejos de fuentes de calor.
Por otro lado,también hay que prestar atención al sistema eléctrico, sobretodo en lo que se refiere a aparatos como el aire acondicionado o los refrigeradores, que trabajan mucho más en los meses de verano y que pueden sufrir algún cortocircuito por culpa de las elevadas temperaturas.
Por último, en cuanto a las paredes de la casa, debemos saber que con el calor pueden contraerse y, con ello, dar lugar a la aparición de grietas. Además, el calor también puede afectar a paredes y suelos de madera, agrietando vigas, deteriorando las uniones entre las lamas...
Aquí podéis encontrar todo tipo de información sobre el aislamiento de la vivienda...
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