Por su parte, a la hora de elegir el mobiliario lo mejor es incentivar la autonomía del niño, con muebles y accesorios que pueda manejar. Además, el orden es fundamental en un dormitorio infantil, por la gran cantidad de libros, juguetes y ropa que en él reunimos, por lo que si conseguimos marcar en el niño la rutina o costumbre de guardar sus objetos personales, notaremos la diferencia.
Es por eso que empezamos proponiéndoos un trabajo muy especial, que consiste en elaborar un pequeño ropero infantil. Se trata de un mini armario, situado a pequeña altura, que podrán utilizar en sus primeros años. En él podremos guardar las prendas de uso diario, acostumbrarle a que cuelgue la ropa cuando se la quite... Además, cuando crezca podremos emplear el ropero como espacio de almacenaje extra. De este modo, para elaborarlo seguiremos los siguientes pasos:
- Con tirafondos y cola blanca construiremos la estructura rectangular que formará el armario, a partir de cuatro maderas que podemos adquirir a medida. Después, pondremos una lámina de madera en la parte posterior del armario con tornillos.
- El siguiente paso es poner una tabla más pequeña en la base de la parte delantera del armario, para terminar así la estructura.
- Instalaremos la barra para colgar las prendas.
- Decoraremos a nuestro gusto, con pintura, plantillas...
- Pondremos las ruedas para hacer que el armario sea más práctico y se pueda mover con facilidad.
Otra opción que fascina a todos los niños y que hoy es una clara tendencia en cuanto a decoración infantil se refiere son los tipis, un pequeño rincón solo para ellos, en el que puedan imaginar y crear todo tipo de historias y cuentos y dónde, además, podrán guardar los juguetes una vez terminada la sesión de juego. Lo mejor es que, una vez más, puede estar en nuestras manos la construcción del mismo:
- Empezaremos uniendo tres barras de madera con cuerda gruesa, por uno de los extremos.
- Pondremos las barras en posición vertical, y abriremos para que queden de pie y se forme así la estructura del tipi.
- Cubriremos las barras con tela de saco o arpillera cortada a medida, y ataremos con otro cordel de menor grosor en la parte superior y en la base de las barras.
- Decoraremos a nuestro gusto, añadiendo parches, una alfombra en el suelo, cojines...
Otros consejos para ordenar y decorar el cuarto de los peques:
1. La lectura es parte fundamental de su aprendizaje y, por ello, es importante que los pequeños tengan los cuentos y libros a mano, para que salga de ellos mismos la decisión de ponerse a leer. Para ello podemos instalar pequeñas baldas a baja altura, y crear así una mini librería.
2. Las cajas de madera son perfectas para este tipo de estancias. Podemos decorarlas a nuestro gusto y añadirles ruedas para que los niños puedan moverlas sin problemas. Así, en ellas podrán guardar los cuentos, los juguetes del día a día...
3. Por su parte, las cajas de plástico son ideales para guardar todo el material escolar: pinturas, cuadernos, libros de años anteriores...
4. Para enseñarles a ser ordenados desde pequeños, podemos emplear organizadores en el interior de los cajones.
5. Las cestas, además de ser decorativas, son perfectas para colocar en estanterías, encima de muebles o en el interior de los armarios, y guardar en ellas, por ejemplo, los productos básicos de aseo: toallitas, colonia, crema...
6. Para conseguir sensación de orden, nuestra recomendación es poner cajas o cestas grandes en los huecos de las estanterías. Con ellas, además, ganaremos en capacidad de almacenaje.
7. Los baúles son un mueble auxiliar perfecto para este tipo de estancias, donde podrán guardar sus juguetes favoritos cada día fácilmente.
8. Por último, poner un perchero a su altura evitará las montañas de ropa encima de la silla o de la cama, pues en él podrán colgar prendas del día a día: el abrigo, la ropa del cole, la bata de invierno...
Si tenemos en cuenta estos consejos conseguiremos que el dormitorio de los niños sea un espacio seguro, cómodo, práctico y, lo más importante, ¡divertido!