¿Qué es exactamente una lámpara solar? Se trata de un sistema que acumula la energía solar durante el día en una batería y la convierte en electricidad para funcionar durante la noche. De este modo, gracias a este tipo de iluminación tenemos la posibilidad de distribuir diferentes puntos de luz a lo largo de nuestros jardines a coste cero, a la vez que hacemos un uso responsable de nuestros recursos.
Y es que, aunque hace algunos años las posibilidades lumínicas de este tipo de sistemas se quedaban un poco escasas, dejándolas relegadas a un uso auxiliar o de acompañamiento, hoy en día podemos encontrar modelos que ofrecen hasta 300 y 400 lúmenes y durante varias horas al día, combinando el uso de placas solares con la tecnología LED. Así, para que os hagáis a una idea de lo que esto supone, esta sería la relación del número de lúmenes con su intensidad:
- Menos de 100 lúmenes: balizas.
- Entre 100 y 200 lúmenes: iluminación media.
- Más de 200 lúmenes: iluminación potente.
Por su parte, en la actualidad podemos encontrar lámparas solares en todo tipo de formatos, desde balizas para iluminar un camino, hasta grandes focos y apliques para iluminar la zona de comedor exterior. Lo mejor es que no necesitan instalación eléctrica, por lo que se pueden colocar en cualquier lugar, incluso en los rincones más inaccesibles.
Pero, además, hoy también podemos contar con modelos de auténtico diseño. Por ejemplo, queremos destacar esta línea de lámparas sobremuro y apliques, que destacan por un diseño minimalista, que combina a la perfección con una decoración moderna y contemporánea. Además, no solo destacan desde el mundo de vista estético, sino también desde el funcional, ya que su campo de luz puede llegar hasta los 30 metros cuadrados, duran en torno a las 8 horas y ofrecen la posibilidad de graduar la intensidad y el ángulo de la iluminación.
¿Cómo los instalamos? ¡Es muy sencillo!
En el caso de los apliques de pared, tendremos que empezar haciendo las marcas en la pared con ayuda de la plantilla de cartón que nos facilitan. Después, atornillaremos los anclajes a la pared, para terminar poniendo el soporte.
En cuanto a las lámparas sobremuro, tendremos que fijar la base en el suelo, ya sea con tornillos si es de cemento u hormigón, o con anclajes sin van en césped o tierra. Después pondremos los laterales sobre la base, para terminar encajando la luminaria en el marco.
Otros consejos para ahorrar con la iluminación de tu jardín:
- Evitar caer en el exceso de luz. Para ello emplearemos diferentes puntos, que nos permitirán iluminar solo la zona en la que estemos.
- Poner sensores de luz en las zonas de acceso.
- Emplear interruptores conmutados, para poder apagar una misma luz desde diferentes puntos.
- Limpiar las bombillas, para evitar que pierdan eficacia.
- Evitar que la vegetación tape los puntos de luz.