En el post de hoy vamos a conocer cuáles son los revestimientos más habituales y las virtudes que nos ofrece cada uno de ellos.
Ventajas de revestir una pared
El principal beneficio que vamos a obtener al cubrir la pared va a ser el aislamiento térmico, que conlleva a su vez un ahorro en el coste de la energía necesaria para calentar y enfriar la casa. Y es que una pared cubierta contribuye a proteger la vivienda de los cambios de temperatura, reduciendo los gastos energéticos hasta en un 50%, ya que mantendrá el calor de la calefacción durante el invierno y evitará perder el frío generado por el aire acondicionado en verano.
Las paredes revestidas también suponen un buen aislante acústico, ya que suponen un elemento más para actuar como barrera frente a los ruidos que puedan provenir de otras habitaciones de la casa o incluso del exterior. Y, si tenemos niños o convivimos con mascotas, nada mejor como vestir la pared con un friso, que es un excelente aliado para mantener la superficie en buen estado y libre de pintadas, arañazos, roces, etc.
Además, gracias a los revestimientos podemos tapar manchas e imperfecciones que puedan existir en el tabique y que tanto afean visualmente la decoración. Y no solo eso, si queremos quitar el tan pasado gotelé... ¿qué mejor que aprovechar este momento para revestir la pared?
Los materiales más comunes para revestir paredes
De la fría pero practiquísima cerámica a la cálida pero exigente madera, podemos recurrir a un sinfín de materiales para dar un aspecto nuevo a las paredes de nuestra casa. Vamos a ver cuáles son los tipos de revestimientos más comunes y en plena tendencia:
Cerámica. Cuando hablamos de 'revestimientos cerámicos', nos referimos generalmente a los azulejos de toda la vida, al gres porcelánico, al barro cocido o al gresite. Son materiales que se han utilizado desde tiempos remotos por sus características especiales: previenen la humedad, son duros, resistentes a los cambios de temperatura bruscos, incombustibles, fáciles de limpiar... Si a esto le sumamos la enorme variedad de cerámicas que podemos encontrar en el mercado, entonces nos encontramos con uno de los revestimientos más vendidos por méritos propios. Aunque solemos encontrarlos en baños y cocinas, son igualmente válidos para decorar cualquier estancia de la casa.
Piedra. Hasta hacer relativamente poco tiempo, la piedra era un material reservado para revestir exteriores. Sin embargo, la piedra puede aportar un toque elegante a cualquier estancia de la casa, por lo que cada vez lo vemos con mayor frecuencia, sobre todo en paredes de salones con chimenea. Su gran ventaja es que se trata de un material indudablemente duro y resistente, pero que a su vez otorga a la casa un aire personal, acogedor... y moderno, pues ya no se utiliza solo en ambientes decorativos de carácter rústico.
Microcemento. Es una opción que está ganando mucha popularidad en los últimos años. Se trata de un material recomendado para viviendas con decoración moderna de estilo industrial. La ventaja es que se puede poner en cualquier superficie (incluso sobre los azulejos del baño), no requiere de obra y, además, es muy duro y resistente al agua... Además, sus acabados pueden ser muy variados y originales.
Papel y vinilos. El papel ofrece grandes ventajas frente a la pintura, ya que es más resistente, hay una amplísima variedad, es fácil de poner y muy fácil de limpiar. Además, decorativamente ofrece un mundo de posibilidades, sobre todo si lo combinamos con pinturas en otras paredes, marcos, molduras, etc. Los vinilos autoadhesivos son de absoluta tendencia, es una opción muy recomendable por lo económica que es y por lo sencillo que resulta de poner, aunque hay que tener en cuenta que se deben colocar sobre paredes lisas, secas y sin imperfecciones. La variedad de modelos de papel pintado y vinilos es tal, que podemos encontrar fácilmente los más adecuados para cualquier tipo de estilo decorativo y estancia.
Madera. No hay ningún material tan cálido ni decorativo como la madera, y en casas de estilo rústico o en estancias abuhardilladas queda perfecta. La pega de la madera es que requiere cuidados regulares para que se mantenga en perfectas condiciones. Sin duda, es el material más exigente. ¿Su gran ventaja? Es uno de los mejores aislantes térmicos y acústicos que podemos encontrar en el mercado. Además, es muy resistente, se instala con facilidad y es fácil de limpiar.
Y tú, ¿por qué material apostarías?
¡Nos vemos en el próximo post de Vivienda Saludable!