Lo primero fue, evidentemente, secar los pétalos de los tulipanes. Durante tres semana en un libro con mucho peso encima. Y así es cómo salieron.
Había un montón de posibilidades y al final me decidí por una tabla que tenía teñida de color humo. Me gustaba el contraste de los colores de los pétalos con lo oscuro del fondo.
A la hora de pegarlos hice primero un lado del corazón y luego el otro.
Y ahora a buscarle un sitio en la casa.
Como cada viernes os recomiendo participar y/o echar un ojo al "Finde Frugal" que organiza Marcela de Colorín Colorado. Una delicia!