Esto no quiere decir que, si no cuentas con buena luz natural en casa, estés abocado a una vivienda sombría y apagada. ¡La solución está en los puntos de luz! Distribuye bien diferentes tipos de lámparas por toda la sala, en función del uso que le des a la misma, y triunfarás. Así, hoy venimos con un DIY que te servirá como luz principal de techo: una lámpara hecha con un cesto.
Cómo hacer una lámpara con una cesta
Las cestas, sobre todo las de mimbre o caña, son ya parte casi irreemplazable de la decoración actual. Cumplen a la perfección con el binomio decoración+almacenaje, por lo que encajan en cualquier estancia: baños, cocinas, salones, dormitorios, en la entradita, en el despacho… Y si esto es así, ¿por qué no darles una nueva utilidad?Materiales necesarios
- Una bombilla, con cable, casquillo…- Una cesta.
- Pintura en spray.
- Herramienta de corte.
- Opcional: cola blanca, cinta de carrocero, plantillas….
Paso a paso
1. Lo primero será decorar la cesta a nuestro gusto. Así, podemos pintarla con pintura de tiza, para poder saltarnos el paso de la imprimación. Pero, además, recomendamos utilizar pintura en spray con este tipo de material, ya que nos permitirá acceder mucho mejor a todos los rincones del cesto en un par de pasadas.También podemos ayudarnos de cinta de carrocero o plantillas para hacer decoraciones a rayas, stencils… Por su parte, si la cesta no es muy gruesa y tiende a doblarse, podemos aplicar varias capas de cola blanca que, al secarse, quedará transparente y aportará rigidez al cesto.
2. A continuación, marcaremos la zona por la que pasará el cable y haremos el agujero con la herramienta de corte.
3. Por último, desmontaremos el mecanismo de la bombilla para pasar solo el cable, volveremos a montar el casquillo, y tendremos nuestra lámpara lista.
Perfecta para todos los estilos
Como ves, en solo tres pasos tendrás lista una de las lámparas que aportarán luz a tu hogar. Económica, sencilla y, sobre todo, versátil, ya que encajará sin problemas con todo tipo de estilos decorativos.Esperamos que te haya gustado este DIY. Nos vemos en el próximo post de Vivienda Saludable.