En esta entrada de hoy os cuento, mi amiga Isabel después de construir la casita de muñecas para regalar a su hermana despertó en ella el gusanillo por el bricolaje, entonces yo la propuse hacerse un banco de trabajo, entonces lo colocaría en su garaje y haría su taller.
Muy contenta con la propuesta que la hice nos pusimos manos a la obra, este es un trabajo del que luego surgirán más proyectos que ya os iré contando y publicando.
En este caso las maderas las compró a un carpintero.
Os paso a descubrir todos los pasos que dimos para su construcción.
Para unir las piezas utilicé un palo de madera, para cortarlo y hacer los tubillones de unión. Con una broca de pala del mismo grosor que el palo hago los orificios.
Presentamos las piezas y con cola de carpintero pegamos insertando los tubillones de unión.
Utilizando unos gatos de fleje como se ven en la foto sujetamos una vez encoladas las piezas.
Como se ve en la foto hacemos dos especies de porterías que serán las piezas que conformen la estructura del banco de trabajo.
En esta foto muestro como con la broca de pala hago los orificios donde insertaré los tubillones de unión.
Una vez ya tenemos las dos "porterías" estructura de nuestro banco de trabajo vamos fijando los listones trasversales con el mismo sistema pegando los tubillones con cola de carpintero.
Foto donde se ven las piezas transversales de nuestro banco de trabajo.
Es importante ir numerando las piezas para que nuestro puzle encaje bien.
Pegamos con cola de carpintero y fijamos con unos sargentos.
Una vez seca, la estructura de nuestro banco de trabajo se lija perfectamente, primero con la amoladora y un disco de lija y luego con la lijadora. Quedando la madera muy lisita.
Como todos nos equivocamos se ve un agujero en la base de una pata, un agujero que no debimos dar pero todos nos equivocamos. jajajaja.
Para la superficies del banco se compraron maderas de 4cm de grosor, ya que el banco debe ser robusto para poder trabajar en el.
Presentamos todas las maderas y comenzamos dando un pequeño taladro para después atornillar las piezas y la madera no se reviente.
ajustamos bien las piezas con el sarjento
Muestra de como vamos taladrando los tornillos deben quedan bien insertado.
En esta foto se ve como abellano un poco la madera para que los tornillos queden bien metidos en la madera.
En la balda inferior del banco de trabajo, las maderas laterales se les hace un corte a modo de cajeado para que se ajuste bien a las patas.
Una vez el banco terminado y bien lijado y pulido procedemos a darle el acabado.
Para ello utilizo este lasur color castaño, que tiene muy buenas propiedades ya que hasta tiene tratamiento fungicida para prevenir ataques xilofagos. Este lasur es perfecto también para maderas que estarán al exterior, aunque este no sea el caso.
El lasur es graso y para darlo correctamente debemos dar con brocha peinando en sucesivas pasadas con poca carga asegurandonos que penetra bien en la madera.
En la balda inferior en los laterales puse unos cuadradillos de madera de palet, para hacer un poco de tope y no se nos caigan los utensilios que coloquemos después.
Nuestro banco terminado.
Es un banco que pesa mucho pero es fuerte y robusto, para poder trabajar cómodamente en el.
El banco una vez colocado en el garaje de mi amiga. Colocó todas sus herramientas, ya que se compró varias y otras heredadas de su padre.
Podemos ver como puso un gato de banco, fijó un ladrón para poder enchufar herramientas eléctricas y puso un punto de luz en el techo, ya que el garaje resultaba un poco obscuro
En el suelo puso unas cajas de plástico de cajas de fruta a las que fijó unas ruedas, en ellas guarda utensilios y las puede deslizar sobre la ruedas a modo de cajón.
Esta idea de las cajas se las di de un trabajo que hice para mi barbacoa
Mi amiga ya tiene su taller, y puedo decir que se está lanzando al mundo del bricolaje y siempre contando con mi ayuda y mi asesoramiento, está sacando muchos trabajos adelante.
me imagino que visteis como forro unas puertas galvanizadas., junto con mi ayuda le quedarón de lujo y yo la ayudé con cuatro pero el resto las hizo ella sola y yo alucino, como va aprendiendo. Desde luego las ganas y la ilusión hacen que nada se nos ponga por medio, y podamos sacar adelante cualquier proyecto.
Con esto quiero animar a todo el mundo, hacer bricolaje en adictivo y muy motivador.
Seamos creativos.
Espero que os haya gustado esta entrada, y espero vuestro comentarios y críticas constructivas.