Hoy os traigo un nuevo DIY. De vez en cuando me gusta explicar paso a paso algunos de mis trabajos para que os animéis vosotros también, detallando los materiales y los truquitos que os puedan ayudar en esto.
El de hoy es bastante especial ya que es una recuperación/reciclaje de un mueblecito que en realidad al principio era un pequeño horno de gas metálico. Se notaba que estaba hecho a mano y además era bastante rudimentario. No sé porqué me gustó porque la verdad es que estaba hecho un asco cuando lo descubrí en un rinconcito de una tienda de segunda mano. Pobre, nadie se fijaba en él. No os podéis imaginar la cara de mi chico cuando vio que me dirigía hacia él con los ojillos que pongo cuando algo me gusta. ¿De verdad que te lo vas a llevar? ¿Pero que vas a hacer con eso?... Ja, ja, pobre. El caso es que me lo traje al taller y me puse manos a la obra.
Así era. Siiiii, ya se que era horrible. Lo que sale por abajo era el tubo para el gas. Tuve que vaciarlo por dentro ya que tenía dos bandejas y el quemador.
Como estaba muy oxidado utilicé una imprimación férrica en spray que tenía ganas de probar. Es de Novasol y va genial ya que no hace falta antes dar ningún otro producto para el óxido. Y además al ser en spray es tan rápido y fácil...
Eso si una lijadita para igualar la superficie y limpiar bien para eliminar los restos de óxido.
Después limpiar y directamente la imprimación férrica.
¿Veis que bien queda? Ya va pareciendo otra cosa...
Una vez bien seco, es recomendable esperar 24 horas, ya directamente la pintura. También he utilizado la pintura acrílica de Novasol para hacerlo todo en spray.
Elegí negro mate para la estructura y gris antracita para las puertas. Aquí pintando el interior.
Y aquí ya el exterior. Es super fácil y rápido. Eso si, siempre debéis esperar los tiempos de secado entre mano y mano. Yo le di dos manos.
A pesar que el sobre del mueble quedó muy bien con la pintura seguía sin convencerme ya que estaba un poco hundido. Se me ocurrió que podría quedar muy bonito un sobre de madera por lo que compré un tablero de pino y lo teñi con tinte al agua castaño. Podéis hacerlo con brocha o un trapito. Después proteger con barniz mate incoloro.
Y ahora toca la parte mas divertida y es que me encanta jugar con plantillas. Como iba a ser de estilo industrial nada mejor que estos grandes números. Son plantillas de aluminio compradas en tienda especializada en pinturas.
Y plantillas de letras de estética industrial. Esta en concreto es de Montaña de Trastos en el Doblao.
En el sobre también puse números.
Y algún que otro adorno mas para darle un aire totalmente industrial. Estos son unas escuadras que pegué en las esquinas de las puertas. Me encantan como quedan.
Y con todo esto así ha quedado este mueble de estilo industrial. Vaya cambio ¿no?
Me encanta el sobre de madera con los números. El castaño queda ideal con el contraste del negro de la estructura.
Este mueble es muy versátil y se le pueden dar muchos usos. De mesita de noche, de mini aparador y porqué no como mueble bar es perfecto.
Para este trabajo he utilizado dos botes de imprimación férrica, un bote y medio de pintura acrílica negro mate y un bote de gris antracita. Todo es de Novasol y la verdad es que me han gustado mucho. Si os interesa, podéis encontrar sus productos en www.aerosolpinturas.com.
Para finalizar como siempre la foto del antes y el después.
Espero que os haya gustado este DIY y que os animéis a reciclar ya que es divertido y sobre todo gratificante.
Besos
Fuente: este post proviene de El Taller de Artes-Ana, donde puedes consultar el contenido original.
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