Estoy adaptándome, con ánimo, a mi nueva situación física y siendo consciente de mis límites que se reflejarán en mis entradas (serán más espaciadas) y la falta de comentarios en otros blogs que me gustan y de los que soy asidua, pero... las circunstancias mandan y, espero, que sepáis perdonar mi silencio aunque esté ahí.
Bueno, sin más dilaciones, comenzaré con una entrada que llevaba mucho tiempo esperando salir jejeje.
Nos regalaron cinco sillas que daban ganas de tirar a la basura... pero a nuestro hijo le hacían falta para su piso de Vigo.
Cuando comenzamos a desnudarlas vimos que le habían hecho un "apaño"...
El respaldo era de barrotes y lo habían tapizado y, desde luego, a mí también me gusta más tapizado.
La estructura y los muelles del asiento estaban en buen estado.
Comenzamos el trabajo por cortar la nueva tela con los patrones del viejo tapizado.
También utilizamos los mismos cartones que utilizaron para el remate del asiento y la parte de atrás de la silla.
Ahora os enseño el cartón que tenía en la parte de atrás del respaldo.
Nosotros le añadimos un poco de miraguano.
Y este es el resultado.
Luego le pedí a mi hijo que me mandara unas fotos de las sillas colocadas, y... estas son..... (están hechas con el móvil) ¡Fijaos en la decoración de la mesa! ¡Lo mato!
¡Ah!, la mesa también es antigua y la restauré yo
Gracias a todos y todas por estar ahí. Besos