¡Qué labor tan excepcional! Y lo es por partida triple: por la belleza del objeto, por el impecable trabajo de nuestra amiga, y por el minucioso paso a paso que desgrana perfectamente la restauración de esta escribanía
A la derecha vemos la culminación del trabajo de la escribanía, en una preciosa puesta en escena, y debajo tenemos varias etapas del proceso.
Nuestra amiga Yenai es una restauradora de categoría, que se ha formado a conciencia en un taller profesional. Muchos talleres de restauración admiten alumnos, que llevan para ejercitarse sus propios muebles, los que desean recuperar. Así, primero viendo atentamente cómo lo hace el maestro, y cada vez con más soltura y dominio, aprenden la manera correcta de reparar los diferentes materiales, con la madera de protagonista estelar por supuesto
Es el caso de Yenai. Y tenemos la suerte de que la artista comparta generosamente sus logros, ¡realmente le agradecemos una explicación tan meticulosa, con lo que cuesta hacer el trabajo y las fotos a la vez!
Qué ocupación más agradable, ¿verdad? ¿Te gustaría inscribirte en un curso de restauración?