1.- Apaga las luces de las habitaciones que no estés usando. Esto repercutirá enormemente en la reducción del consumo eléctrico y posteriormente en la factura de la electricidad. Además podrás aumentar un poco más la vida útil de las bombillas.
2.- Apaga la tv si no la estás viendo: Se ha determinado, que más del 40 % de las personas que se encuentran con el tv prendido muy pocas veces lo esta observando. Es mucho más ahorrador encender el radio y oír buena música.
3.-Desconecta los equipos que no estés usando: Aunque los equipos no se encuentren en funcionamiento, el hecho de mantenerlos conectados produce que la electricidad continúe fluyendo a través de ellos.
4.- Deja que la luz natural ilumine tus espacios: Durante las horas del día, es muy inconsciente que tengamos las luces de nuestra casa encendida, sobre todo si se cuenta con ventanas grandes que permiten una gran entrada de luz natural a nuestras habitaciones.
5.- Adquiere bombillas ahorradoras: En el mercado existen una gran cantidad de bombillas de distintos tipos, pero las que poseen luces LCD o bombillos de luz fría son los más ahorradores y duraderos del mercado.
6.- Desconecta los cargadores: después de cargar tu teléfono, tableta o laptop: Esto es imprescindible si lo que andas es buscando ahorrar energía, puesto a que al mantenerse conectados, estos dispositivos continúan consumiendo energía.
7.- apaga el calentador si no lo estas usando: Una de las fuentes de consumo de energía más grande de las casas es el calentador de agua eléctrico. Esto se debe a que pasa la mayor parte del día encendido el agua no es utilizada.
8.- Apaga el aire acondicionado eventualmente: el aire acondicionado es una gran fuente de consumo de energía, sobre todo si se mantiene muy frío durante la mayor parte del día, lo más lógico es que se encuentre entre 21° y 23° para que el consumo no sea tan abrupto
9.- Revisa los escapes de aire: si utilizas aire acondicionado o calefacción para las épocas frías, deber estar pendiente de que el aire interno de la casa no se escape por las ventilas que pueden quedar en los bordes de las puertas o las ventanas, ya que esto fuerza al equipo haciéndolo trabajar más.
10.- Desconecta tu pc: Los ordenadores son una fuente de consumo de energía que nunca se apaga. Por tal motivo, es importante desconectarlo al dejar de usar el pc, ya que por cada bombilla que quede encendida en el equipo es mayor el consumo energético al final del mes.
Por último, revisa los resultado en tu factura mensual para que veas cómo te podrás ahorrar unos centavos.