Muy buenas aquí estoy de nuevo con este trabajo, fue un encargo el primero y único hasta la fecha. La persona a la que se lo hice quedó en mandarme mas fotos de como quedaba esta mesa en su sala pero como no me las mandó....pues yo publico lo que tengo.
Una vieja puerta convertida en una mesa. Un trabajo muy costoso pues limpiar esa pintura me dio mucho trabajo. Pero creo que mereció la pena. A ustedes ¿Que les parece?
Lo primero de todo quité los herrajes de la puerta, este ere un cerrojo, y como estaba cajeado en la madera tuve que hacer una pieza para rellenar el hueco.
Con madera de palet del mismo grosor que el hueco hago la pieza que pego con cola de carpintero.
Posteriormente relleno las grietas con masilla a base de serrín y cola de carpintero, y cuando esta seca procedo a lijar. Quedando como se puede apreciar perfectamente integrado.
La puerta tiene un acabado muy costoso de eliminar.
Como con la lija no salía, tuve que recurrir al decapante y la lana de acero.
En esta foto se aprecia como eran las bisagras.
Que por supuesto también quito.
Para tapar los orificios donde iban los tornillas de las bisagras, emplastezco con la masilla de serrín y cola de carpintero.
Este es el decapante que usé para limpiar la puerta, lo voy aplicando con brocha por partes y voy frotando con lana de acero hasta que la madera queda perfectamente limpia.
Una vez retirada toda la capa de pintura porcedo a lijar muy meticulosamente la madera. Quedando un suave tacto, y como base para que quede bien el acabado que le haré.
Con nogalina y anilina de color verde hago un tinte, que aplico con brocha y voy frotando con un paño para difuminar el tintado
foto detalle de como queda el acabado.
Puerta totalmente teñida. Como los tintes utilizados son con base al agua el poro de la madera se levanta por lo que una vez teñido procedo a bruñir la madera.
El bruñido de la madera lo hago frotando con un estropajo de esparto, y se puede observar el suave brillo satinado que adquiere la misma después de frotar.
foto detalle donde se ve la madera teñida y bruñida.
Las patas las consiguió el dueño, en el Leroy Merlín y van atornilladas a la puerta. Se colocaron así para dar mayor estabilidad a la mesa.
Para hacer el acabado se le da después una mano ligera de esmalte acrílico blanco.
Cuando este esmalte seca se le frota con lana de acero logrando un desgastado que deja entrever la madera teñida.
Para finalizar a toda la mesa se la da una mano de cera incolora. Os puedo asegurar que el tacto es increíblemente suave y aterciopelado.
Queda un bonito satinado.
Foto final de la mesa terminada.
Que pena que no tenga fotos de como quedó integrada en la preciosa decoración de la sala del dueño.
Este es todo el trabajo, como siempre agradezco vuestros comentarios y críticas constructivas.