¿Qué hacemos con ellas? Parece complicado cambiarlas nosotros mismos, ya que se encuentran integradas a la campana y no sabemos lo que podemos encontrar una vez que retiremos el casquillo. Sin embargo, es mucho más fácil de lo que parece poder cambiar las lamparas del extractor. Es tan sencillo como cualquier otra bombilla, con una serie de pasos podremos hacerlo nosotros mismos y ahorrarnos tener que llamar a alguien para que nos lo haga, ¿os animáis?
A continuación te mostramos los pasos para cambiar las lamparas del extractor en casa tu mismo:
Lo más importante es desconectar la corriente eléctrica de toda la casa. Una vez hecho, pasamos a retirar la lámpara fundida. Tenemos que quitar el embellecedor que la protege, aunque normalmente solamente es necesario desenrroscarlo, se quita fácilmente.
Antes de poner la nueva lámpara debemos verificar que sirve para la campana extractora que tenemos en casa. Existen distintos tipos de bombillas. Hay que fijarse bien en la potencia y el voltaje para poder tener una iluminación homogénea, puesto que de otra forma se notará la diferencia de luz entre las bombillas que ya teníamos y la nueva.
Aunque tienen un tamaño muy reducido, lo bueno de estas bombillas es que están protegidas con una fina película de plástico, que hace que además de no romperse, no se estropee con el contacto de nuestra piel, ya que la poca grasa corporal que tengamos en las manos puede dañar el cuarzo. No debemos retirar ese fino plástico.
Volvemos a colocar la lámpara en su posición original y ponemos también el embellecor. Conectamos la corriente general de luz y comprobamos que funciona.
Sencillo, ¿verdad? Como podéis comprobar, con un poquito de tiempo y paciencia, podemos cambiar nosotros mismos nuestra lámpara del extractor sin gastarnos nada de dinero.