Esta mesa es el resultado de reciclar varios elementos que tenía disponibles. Por una parte madera de palet, por otra un cesto de mimbre muy antiguo, pero en muy buen estado y por último el cristal de la puerta de una lavadora.
Materiales
Madera de palet
Cesto de mimbre.
Cristal de puerta de lavadora.
Tablero de madera, dm o lo que tengáis a mano. Para la base de la mesa.
3 ruedas.
Pintura blanca y barniz incoloro.
Cómo hacerlo. A reciclar!
El proceso para crear esta mesa es muy simple. Teniendo todos los materiales, no lleva más de una tarde terminarlo. Así podréis disfrutar de esta mesa que quedará genial en vuestra terraza o jardín. Los hielos, las cervezas o el contenido que queráis ya os lo dejo a vuestra elección.
Tendremos una mesa con un hueco para rellenar a placer
Lo primero es juntar varias tablas de madera de palet de una misma medida, para crear un tablero con las dimensiones deseadas, en mi caso unos 60x60cm. Hay que unirlas con cola de carpintero y sujetarlas mediante otra madera para que no se separen mientras seca. Unas 4 horas.
Mientras dejamos que la cola seque se puede ir preparando el cesto. El cesto que yo tengo estaba bastante bien, a pesar de tener más de 60 años. Pero un ligero lavado de cara le va bien. Para quitar la suciedad lo hago con agua y una manguera a presión, con un poco de cuidado y ayudándome de un cepillo un poco duro. Dejo secar y aplico un par de manos de barniz incoloro respetando los tiempos de secado entre manos.
Cortar un hueco redondo para cristal
Volvemos a nuestro tablero que habíamos dejado secando. Pasado el tiempo suficiente para que haya agarrado bien la cola, dibujamos un circulo de diámetro ligeramente superior al del cesto, aunque esto dependerá si se quiere dejar algo de vuelo en la mesa, en ese caso el circulo con el diámetro deseado. Con la sierra de calar cortamos siguiendo la línea dibujada y obtenemos nuestro tablero circular, al cual dibujaremos y cortaremos otro círculo en el medio lo suficientemente grande para que entre y no se cuele nuestra puerta de lavadora.
Hay que hacer unos rebajes para salvar las asas del cesto y que pueda apoyar completamente la madera sin moverse.
Ahora tocaría usar la lija de mano o bien una eléctrica para repasar la madera y dejarla preparada para después. Aunque yo lo que hice fue dar un lijado a todo primero, yo os recomiendo que este proceso de lijar y limar los bordes lo hagáis una vez esté todo cortado. Ya que os ahorrará tener que lijar partes que luego se desecharán. Hacer rebajes, limar y lijar la superficie
Para dar solidez al tablero atornillamos unos travesaños de madera, de tal manera que no estorben ni para acoplarlo con el cesto ni con el cristal de lavadora u ojo de buey.
Si vuestra mesa se va a quedar fija en un lugar no es necesario hacerlo, en caso contrario un tablero con ruedas unido al cesto os permitirán mover la mesa. Atornillar travesaño para dar fuerza y acoplar ruedas
Para pintarlo, depende del resultado que queráis se puede dar una mano de imprimación previa. A mí, por ser algo que va al exterior, me parece mejor dejarlo con un toque más “desgastado”. Para ello pinto sobre la madera lijada y limpia. Después, cuando la pintura esté seca, con una lija fina damos un repaso general y con una un poco más gruesa hacemos efectos de desgaste a placer.
Finalizamos dando una mano de barniz, ya sea spray o aplicado con brocha o rodillo. Dar una mano de pintura, lijar para desgastar y barnizar
Y con esto ya tenemos nuestra mesa, con hielera para enfriar las cervezas, el vino o hasta se me ocurre llenarlo de palomitas. Las posibilidades son muchas.
Hasta la próxima! Abrazos jurricheros!
Resultado final de mesa con cesto y cristal
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